Superan la primera prueba

AutorAlberto Acosta

"No buscamos privilegios por ser mujeres. Hicimos el curso yo creo que hasta mejor que los hombres, la verdad, porque llevamos mucha teoría, mucha práctica. Llevamos más tiempo de capacitación, de mecánica, de trato con la gente, fue más extenso, con más horas".

Lilia Núñez, 40 años de edad, ama de casa.

"No nos gustaría que nos dijeran microbuseras porque se escucha muy feo, muy despectivo. Somos operadoras de microbús o autobús. Estudié la Licenciatura de Letras Hispánicas en la UNAM, pero vi esta oportunidad de empleo y me animé porque además hay oportunidad de trabajar un rato y seguir estudiando".

Aidé Moshima, 25 años de edad, estudiante.

"Pues ya tenemos nuestro tarjetón, pero seguimos sin chamba. Más que mandarnos a la guerra sin fúsil, digamos que ya tenemos el fúsil (el tarjetón) y ahora sólo falta la guerra, el trabajo, que es nuestro fin. El problema es que tenemos pocas ofertas de empleo todavía".

Delia Torales, 48 años, ama de casa.

Aidé Moshima es pasante de la Licenciatura de Letras Hispánicas de la UNAM, actualmente trabaja en su tesis y quiere aprender fotografía y cine.

Pero para pagar esos estudios, la joven de 25 años de edad necesita un empleo redituable, por eso buscó una opción y ahora forma parte del padrón de choferes del transporte público de pasajeros del DF.

Aidé acudió ayer, junto con Lilia Núñez y Delia Torales, al Módulo de Velódromo, donde les aplicaron las pruebas finales teóricas y prácticas para obtener su Licencia - Tarjetón Tipo C, que avala sus conocimientos como conductoras de "micros" y "autobuses".

Las tres forman parte del programa Mujeres en Ruta, a través del cual la Secretaría de Transportes y Vialidad (Setravi) pretende incorporar a al menos 100 conductoras en rutas de microbuses y así incrementar la presencia femenina en ese sector, bajo la premisa de que ellas son más responsables y menos conflictivas que los varones.

Aidé, Lilia y Delia obtuvieron su licencia-tarjetón, luego de haber recibido capacitación durante más de mes y medio que incluyó exámenes médicos generales, antidoping, prueba del alcoholímetro, cursos teóricos y prácticos, con pruebas en simuladores de manejo, patio de maniobras y labor en campo, donde lo mismo condujeron microbuses que camiones.

"Como mujeres, no buscamos ningún privilegio. Hicimos el curso yo creo que hasta mejor que los hombres, porque de verdad llevamos mucha teoría y mucha práctica.

"Ellos también hacen bien su curso, pero nosotras llevamos más tiempo de...

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