Sugieren mirar lo de atrás

¿Cuáles son sus criterios a la hora de elegir un producto? ¿El tamaño, el precio, el color?

Con regularidad son aspectos como éstos los que suelen tomarse en cuenta, pero la clave de una compra inteligente radica en una pequeña acción: leer las etiquetas.

Esta herramienta nos ayuda a conocer especificaciones de los productos con el fin de tomar una buena decisión en el momento de compra.

"Las etiquetas permiten comparar entre productos de la misma especie o género y tomar una mejor decisión. Así se tiene un menor riesgo para la economía, la seguridad, la vida y la salud de los consumidores", explicó Engels Ruelas, director general de verificación de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).

Según explica Ruelas todo tipo de productos y servicios en general deben cumplir con el requisito de tener una etiqueta, aunque la especificidad del contenido varía de acuerdo con la legislación vigente.

"En términos generales, la información que contienen debe estar escrita en español (...) debe ser legible a simple vista y debe estar exenta de textos, diálogos, imágenes que induzcan al error, confusión, o que sea información tendenciosa".

"En cuanto al contenido nutrimental, debe incluir el contenido, origen, composición, valor nutrimental, especificaciones técnicas, beneficios, características, funcionamiento, instrucciones, advertencias, entre otras. De conformidad con la Ley Federal de Protección al Consumidor, deben proporcionar información clara, veraz, objetiva y oportuna", detalló Ruelas.

La información contenida en las etiquetas es muy valiosa, por ejemplo, para cuidar de nuestra salud: así podemos enterarnos del porcentaje de grasas saturadas, azúcares, sodio y...

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