Sugerencias del Gourmet/ 'Palomazo' en la cocina

AutorG. L. Othon

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En el mes de diciembre no recomiendo la salida a restaurantes a los que no sienten especial fervor por las multitudes, pues la época de festejos atiborra hasta los más malos y finalmente, si se trata de festejar, nada mejor que echar mano a los clásicos caseros de siempre. Unas sencillas botanas, de verduras crudas, frutos secos, buenos tequilas, y vámonos....

No obstante, con buen espíritu y con el semblante pleno, el mes pasado me reuní con mis amigos del colegio en Las Palomas para vernos una vez más, antes del cambio de siglo.

La idea no había sido mía, por lo que, con más curiosidad asistí a la cita. Había desayunado un par de veces allí, hacía muchísimo tiempo y mis recuerdos eran gratos.

Recibió mi coche el impecable valet parking. Tratándose de la lateral de Américas, campeona en estrecheces, este servicio se comporta con dignidad y aplomo.

El lugar, aunque cuenta con una muy buena ubicación y gran estilo mexicano, no es ciertamente un sitio para cenar, como yo me había permitido pensar; por un lado, imagino que por lo del asunto del festejo, y por otro, porque el diseño gastronómico no está dirigido al deleite de la vianda propiamente tal, sino más bien al del 'caldo'. Público joven, con más ánimo de líquidos que de sólidos, concurre este restaurante por las noches.

El decorado es sencillo, pero con distinción. Unos calentadores para exteriores, estupendos, nos mantuvieron cobijados todo el tiempo.

Equipales, veladoras, plantas bien cuidadas y buena música, acompañan a un equipo eficiente de meseros, bien organizados, dirigidos por un maestro del acomodo.

A un costado del patio comedor, hay un puestecito para la confección de las tortillas, sopes y quesadillas (que después me arrepentí de no haber pedido), pues la 'seño' encargada de la preparación se veía experta, impecable y eficiente en sus funciones.

Para comenzar, varias cervezas Casta (15 pesos), unos mojitos (23 pesos) y unas micheladas (18 pesos), poblaron nuestra mesa. Las botanas como las alitas de pollo BBQ (25 pesos), de una muy bonita presentación, no sabían a nada. El chicharrón de queso (18 pesos) estaba frío, quemado e insípido; quedó sobre la mesa. El guacamole (25...

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