Sugerencias del Gourmet/ Ojalá haga historia con su sabor
*** (tres tenedores)
Siempre he pensado que nuestra Villa de Santiago es un San Miguel de Allende en potencia y que sería fascinante ver las calles de esta encantadora población llenas de galerías, tiendas de antigüedades y estudios de artistas de la plástica (ya Héctor Carrizosa se posesionó de una casa y desde ahí se promueve).
Platicando de ello con un grupo de amigos y enfocando nuestra plática en Santiago, N. L., supe de la apertura de un nuevo restaurante, ubicado justo a un lado de la iglesia, de nombre La Parrokia de Villa, cuyo propietario, el suizo Rolando Benoit, casado con la regiomontana Adriana Aguirre de Benoit, está verdaderamente enamorado de la Villa, tanto que desea convertirla en un San Miguel de Allende. ¡Ya ven que no me equivoco en mis apreciaciones!
Ese es precisamente el comentario que él ha externado a mucha gente oriunda de este lugar; es más, desea adquirir una de las antiguas casas de doble piso que está frente a la plaza principal, para convertirla en un hotel. ¡Se imaginan el éxito que tendría!
Bueno, pues el caso de Rolando y Adriana es otro de los típicos en que una joven regia sale a estudiar fuera, conoce a un extranjero, se casa con él y se lo trae a Monterrey, para luego abrir un restaurante; sin embargo, ellos se hicieron novios en el Distrito Federal, en donde cursaban la carrera de administración en el Tec de Monterrey.
Sin duda se trata de una pareja que ya trae lo restaurantero en la sangre; la familia de Rolando, específicamente su papá, tuvo varios establecimientos en el Distrito Federal, en donde impuso la moda de las barras de ensaladas. Y como buen suizo, también fue relojero, profesión que heredó a su hijo, quien además tiene una joyería en el Centrito Valle. Por si esto fuera poco, Adriana también aportó su experiencia, ya que su papá fue dueño de un restaurante-bar.
Mi mujer asegura que La Parrokia de Villa es una monada como restaurante; se nota que Rolando pensó en darle gusto a todo mundo. Para empezar, cuenta con el área principal muy bien climatizada, de corte muy familiar, en donde está ubicado el bar, pero también con un portal de arcos que da a la plaza, en donde colocó varias mesas, pensando tal vez en las parejas, pues el ambiente aquí es muy romántico.
La casona está ubicada en una esquina y fue muy bien aprovechada. Tiene un patio central en donde están algunas mesas, además de un área de juegos para niños que, muy posiblemente, antes funcionó como traspatio, en donde se...
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