Sufre ahora Europa crisis de suicidios

AutorInder Bugarin

Corresponsal

RUSELAS.- El griego Dimitris Christoulas se topó con un callejón sin salida: su pensión ni siquiera le alcanzaba para cubrir la canasta básica de su hogar, al tiempo que los intereses por el impago de sus impuestos lo estaban asfixiando.

Desesperado, el farmacéutico jubilado, de 77 años, se quitó la vida el 4 de abril frente al Parlamento de Atenas pues, como dijo en un escrito, prefería morir antes que tener que buscar comida en la basura para su familia.

El suceso ha conmocionado a una sociedad que se siente identificada con su historia.

"Papá, no pudiste comprender por qué nos robaban nuestra democracia, nuestra libertad e integridad. Por qué nos sometían a un cruel apartheid social y económico. No pudiste comprender por qué se llevaban nuestra soberanía y las llaves del nuestro país", dijo la hija de Christoulas durante un homenaje, que terminó siendo un llamado a la resistencia para quienes viven sepultados por la duda sobre su futuro.

El mensaje de la hija del "mártir de Grecia", como han terminado por llamarle los diarios locales conservadores, no fue menor, pues la crisis está arrinconando a centenares de griegos quienes, desesperados, están eligiendo el camino del suicidio.

Desde 2010, las jubilaciones basadas en el salario mínimo han disminuido 15 por ciento, mientras que las superiores a mil 200 euros (mil 500 dólares) mensuales han caído 20 por ciento.

De manera simultánea, los suicidios han aumentado en el país 40 por ciento desde ese mismo año, de acuerdo con estadísticas del Ministerio del Trabajo.

"Es una vergüenza. Todos vamos por el mismo camino. Vamos a terminar suicidándonos todos", aseguró Zoe Tsirogianni, la jubilada de 68 años que, en febrero pasado, amenazó con tirarse por la ventana de su despacho tras enterarse de su despido.

La epidemia no ocurre sólo en Grecia. Las estadísticas también están aumentando en otros países sacudidos por la crisis, como Italia y Chipre, donde el suicidio era una rareza.

En Roma ven con preocupación el incremento de suicidios entre los hombres de negocios en bancarrota.

Éstos han escalado 30 por ciento desde el estallido de la crisis. En 2008 se contabilizaron 260 casos entre empresarios desempleados o declarados en quiebra, mientras que en 2009 hubo un total de 357.

"Son cifras oficiales, pero pienso que el número de suicidios es mucho mayor. Sabemos de varios casos en los que la familia trata de ocultar las verdaderas causas de muerte", sostuvo Guiseppina Virgili...

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