Con la suerte y Galindo

METRO / Enviado

Pachuca.- En lo que resulto su partido más flojo del torneo, la Máquina del Cruz Azul tuvo la suerte de su lado y de la mano de Benjamín Galindo, el equipo celeste derrotó 2-1 a los Tuzos del Pachuca y mientras los Cementeros siguen viento en popa, el equipo de Javier Aguirre continúa su vertiginosa caída que parece llevarlos de vuelta a la Primera División A.

Pachuca no mereció la derrota, fue por largos lapsos del partido, el mejor equipo sobre la cancha de estadio Hidalgo, incluso, hasta el técnico de la Máquina, Luis Fernando Tena, aceptó que lo más justo hubiera sido el empate "porque la verdad, nos pusieron en serios predicamentos en gran parte del partido".

Pero Pachuca es el rey de las imprecisiones. No hubo jugador de los Tuzos que no equivocara un pase, sus delanteros fallaron oportunidades cantadas de gol, los mediocampistas perdían constantemente su lugar en la cancha y para colmo, Mauricio Gómez cooperó a la caída con un autogol. Definitivamente, fueron los jugadores Tuzos, y no los Cementeros, los que cavaron su tumba.

En la tribunas, los aficionados desplegaron una manta con la leyenda "1968, el pueblo no olvida", lo que demuestra que la fanaticada de Pachuca tiene memoria, pero no tiene equipo.

Con esta victoria, Cruz Azul se mantiene en el Superliderato y a la cabeza del Grupo I con 24 puntos y el sábado próximo, pondrá en juego su posición de privilegio cuando reciba a las Chivas de Guadalajara, el sublíder del campeonato. Pachuca se quedó con siete unidades en el penúltimo lugar del Grupo II, pero lo más preocupante es que no sale del fondo de la tabla de...

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