Subsidio al ingreso

AutorAlberto Barranco Chavarría

Aunque retoma la propuesta en boga a nivel global de privilegiar los impuestos al consumo, atenuando o de plano eliminando el que se aplica sobre la renta, las "Bases para un programa de Gobierno" del Grupo Financiero Bancomer introducen una modalidad a la mexicana: la implantación paralela de un subsidio al ingreso para intentar equilibrar la balanza.

Dicho con todas las letras, el Gobierno le transferiría recursos a las familias cuyos ingresos se ubicaran por debajo de la "línea de pobreza, en sustitución del subsidio que permite su acceso a determinados productos y servicios. La acción, a juicio de la intermediaria, le permitiría a los beneficiados decidir libremente el destino del dinero, e impediría la distorsión de los precios relativos.

Por lo demás, la idea planteada en la coyuntura de la piñata electoral, se apuntala en la hipótesis de que gravar el consumo es neutral sobre las decisiones laborales de los individuos, genera un mayor incentivo para el ahorro e implica un menor costo en bienestar social, así como una menor utilización de recursos por parte del Gobierno para fiscalizar el pago de tributos.

El punto, metidos al detalle, sería aplicar gravámenes al gasto tipo el IVA, a tasa única, e impuestos específicos en algunos mercados que presentan demandas inelásticas, como es el caso de los especiales a la producción y servicios, en concierto con la eliminación del Impuesto sobre la Renta tanto para personas físicas como morales.

"Un gravamen sobre el ingreso laboral -abunda la exposición de motivos- afecta las decisiones de los individuos acerca de cuánto tiempo dedican al trabajo. Entre mayor sea la tasa impositiva, media y marginal, menores serán las horas que los individuos estén dispuestos a trabajar. Una tasa impositiva progresiva sobre el ingreso laboral implica, en el margen, un sesgo en contra del trabajo.

"Un impuesto al ingreso de los individuos, sea proporcional o progresivo, grava el ingreso laboral obtenido en el presente y el ingreso derivado de la riqueza personal acumulada. Por lo mismo, el impuesto al ingreso laboral tiene un sesgo en contra del ahorro".

Desde otro ángulo, las "Bases para un programa de Gobierno" suscritas por el banco encabezado por Ricardo Guajardo Touché, apoyan la implantación de una política industrial en que, aprovechando las ventajas comparativas de cada sector y cada región, se determine qué industrias se expanden y cuáles no. El punto de arranque se condensa en seis puntos:

-Para...

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