Submarino Político

¿Procuraduría o Santo Oficio?Leo Agusto

EL GRAFICOSegún las primeras y agudas investigaciones de la PGJ de la capital, dadas a conocer desde la cuenta oficial de la dependencia en Twitter, a Lesvy Berlín Osorio Martínez la ahorcaron con el cable del auricular de una cabina telefónica porque consumió alcohol y drogas, porque vivía en concubinato con su novio, un trabajador de intendencia de la misma UNAM o porque debía materias en el CCH.

Hay algo que la clase política mexicana no termina de entender: los ojos de la prensa mundial están puestos en nuestro país. Especialmente el jefe de gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera; el rector de la UNAM, Enrique Graue y el procurador de justicia de la capital, Rodolfo Ríos Garza, (a quien se le reconoce la aceptación del gazapo lamentable), servidores públicos que nos ocupan en esta entrega por el asesinato de la joven Lesvy Berlín en las instalaciones de nuestra sobrevalorada máxima casa de estudios.

La atención de la prensa mundial que ahora tiene México es un fenómeno que no se veía desde la irrupción en la escena pública del Ejército Zapatista de Liberación Nacional en 1994.

Ahora, a nivel local, los crímenes que en privado nos indignan como sociedad, rara vez pasan de las conversaciones de café a la protesta pública en la calle o en las redes sociales.

El caso de Lesvy se hizo visible gracias a un grito de guerra impulsado por valientes mujeres: #SiMeMatan, un hashtag que se convirtió en tendencia nacional en la red social del pajarito, donde expusieron lo que se diría de ellas en caso de que convertirse en víctimas de homicidio e inspiradas en el discurso de odio del gobierno perredista en la capital, que sólo habla de equidad cuando busca el voto femenino.

La impunidad es vista como regla y no como excepción desde el ámbito nacional (como parte del paisaje surrealista), pero lo que resulta cotidiano para muchos, es abordado desde una perspectiva más justa por corresponsales de agencias de noticias y medios internacionales. El caso del feminicidio ocurrido en el campus de Ciudad Universitaria causó escozor porque el gobierno de izquierda capitalino culpó a la víctima de su propia muerte desde la Procuraduría de Justicia, convertida en Santa Inquisición.

La criminalización de víctimas ha sido el sello del gobierno de Miguel Ángel Mancera y...

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