Cuando subir escaleras es asunto de vida o muerte
| Autor | María Silva |
Es casi un hecho que los puentes peatonales sólo existen para sacarles la vuelta. Por lo menos mucha gente rehúye subir y bajar las escaleras, y en forma temeraria cruza las avenidas.
Y pensar que por la falta de cultura de moverse y utilizar escaleras muchas personas han perdido la vida.
"Toda invitación a realizar cualquier tipo de movimiento debe ser bien recibida, ya que la falta de actividad física en forma regular ha ocupado un papel muy importante, en cuanto a causas de mortalidad en forma general", explica Karina Salas Longoria, especialista en medicina del deporte y rehabilitación.
Si se pone como ejemplo caminar, agrega, se trata de un ejercicio natural y económico al que todos pueden tener acceso.
"En las últimas fechas se ha vendido la idea de que entre más rápido y menos esfuerzo, mucho mejor", comparte. "Si se toma el ejemplo de cruzar las calles o avenidas mediante la vía incorrecta, obedece a la falta de cultura de no tener en mente ubicar un puente peatonal por no dedicarle más tiempo y esfuerzo.
"Aparte de que es más seguro, utilizarlo implica activar, principalmente los miembros inferiores, que son músculos muy grandes y factibles de adquirir tono y fuerza. ¿Por qué no lo hacemos?, porque cuesta un poco más de esfuerzo y tiempo, y es el escudo que ponemos para no realizar muchos hábitos de actividad física en forma correcta".
Por su parte, Carlos Garza Moreno, traumatólogo y especialista en medicina del deporte, coincide en que caminar tonifica las piernas y glúteos y mejora la función del corazón, pero además se ha comprobado que hay una mayor supervivencia al cáncer entre los pacientes con vida activa.
"Una incidencia mucho menor de enfermedades cardiovasculares, y liberación significativa del estrés, entre muchas otras bondades, entonces en muy pocos casos podemos obtener tanto beneficio con tan poco esfuerzo como caminar", enfatiza.
Otra comodidad del diario vivir es elegir el elevador y no la escalera, al grado que lo primero que se hace al llegar a un edificio es preguntar en dónde está el elevador.
La razón es también la rapidez, pero aunque sean muchos pisos, se recomienda, mínimo, subir dos o cuatro niveles, dependiendo de la edad y condición física; detenerse de dos a tres minutos para tomar aire, y continuar con el ascenso lo más que se pueda. Igual si es de bajada, explica Salas Longoria.
En el trabajo, subraya la especialista, el uso de escaleras permite gozar de un mejor estado de ánimo, estar más alerta y...
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