Sube la cafeína
| Autor | Omar Magaña |
Si en los días pasados se dijo que el concierto de Rod Stewart fue una locura, el concierto de Café Tacvba en el Auditorio Telmex de anoche superó por mucho ese y muchos otros directos.
El concierto de los "satelucos" dio demasiado de qué hablar en tres horas de éxitos, bailes, gritos, ovaciones, peticiones y despliegue técnico de la que es, tal vez, la mejor y más popular banda alternativa de México.
Visuales en forma de caleidoscopios con imágenes folclóricas deformadas, racks con luces a la Daft Punk, coreografías, y la interacción de Cone Cahuitl (Rubén Albarrán), su vocalista, con la audiencia -que saturó el Telmex- convirtieron este show en uno de los mejores conciertos ofrecidos en el recinto.
Como este concierto estaba dedicado a la promoción de su nuevo álbum, "Sino", el grupo abrió con "Seguir Siendo/Tengo Todo", pero después de un tema más de la nueva producción los tacvbos comenzaron a complacer a sus fans de toda la vida con los éxitos, para que la escalada de gritos y ovaciones hiciera explotar el auditorio.
"Eo" y "Cero y Uno" iniciaron la pendiente hacia la cima y cuando llegó el tema "Las Flores" aquello encontró su primer pico.
"Que la música disuelva el tiempo y el ego", dijo Cahuitl al público en sus primeras interlocuciones con el público, en las cuales no escondió o disimuló un marcado acento capitalino y su rasposa voz.
Los tacvbos hicieron desfilar uno a uno temas del disco "Re" y luego pasaron a un set de baladas con una de las sorpresas más gratas de la noche: una cortina de luces que cubrió a los cuatro entre "Una Mañana" y "El Río/Polen".
En esos primeros minutos, la multitud comenzó a lanzar los primeros coros para exigir que los tacvbos tocaran de una vez "El Baile y el Salón", pero la petición fue calmada por Cahuitl, quien prometió que habría mucho más.
El cuarteto ofreció un concierto que se alargó desde las 20:45 horas hasta después de las 23:45 horas, tiempo en que el vocalista bailó al estilo disco, subió a las bocinas, dio volteretas, gritó y se habló una y otra vez con los "muchachos".
Otra sorpresa llegó cuando una treintena de chicas subió al escenario por invitación del vocalista para darle vida a "Chica Banda".
Después de dos horas la gente quería más y seguía pidiendo "El Baile y el Salón", tema que llegó hasta después de la primera despedida de la banda, alrededor de las 22:45 horas.
La energía de Cahuilt aún le bastó para subir al...
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