La sombra de la violencia
Staff
Los chihuahuenses irán a las urnas para renovar la Gubernatura, 67 alcaldías, y 33 diputados locales con el triste récord de ser la entidad con el mayor número de ejecuciones, más de mil 300 en lo que va del año.
Pesará también sobre los comicios el fantasma del abstencionismo, que contagió hace seis años a un 56 por ciento de los electores, cuando el priista José Reyes Baeza ganó contra el panista Javier Corral.
Comandos que asesinan, secuestros, balaceras, ajustes de cuentas entre grupos delictivos y enfrentamientos de sicarios con el Ejército y la Marina fueron el pan de cada día de las campañas políticas, en especial en Ciudad Juárez.
Culminaron sin que el plan "Todos Somos Juárez. Reconstruyamos la Ciudad", implementado por el Gobierno federal con la coordinación de las autoridades locales, tuviera resultados tangibles a más de 120 días de su arranque.
Uno de los principales objetivos de dicho plan era reducir la violencia en ese Municipio fronterizo, lo cual no se ha conseguido.
En medio de la extrema violencia, el PAN y el PRI se disputan la gubernatura y las principales ciudades. La capital Chihuahua es panista, mientras que Ciudad Juárez es priista.
El candidato priista a la Gubernatura, César Duarte, logró aglutinar una alianza con PRI, PVEM, PT y Nueva Alianza; mientras que el PAN irá solo con el Alcalde con licencia de Chihuahua, Carlos Borruel.
La ventaja que tuvo el priista al inicio de la campaña se ha ido reduciendo conforme avanzó el tiempo.
El PRD, que en 2004 apoyó al panista Javier Corral en alianza con Convergencia, decidió esta vez impulsar un candidato propio, Luis Adolfo Orozco.
Los candidatos enfocaron sus promesas sobre el tema de la lucha contra la inseguridad y sobre la economía, asuntos que más preocupan a los electores según encuestas realizadas por los equipos de campaña.
Es que la industria maquiladora, que emplea miles de chihuahuenses resintió particularmente la crisis mundial que inició en Estados Unidos.
Hechos de violencia afectaron la campaña. Duarte denunció que una camioneta de su convoy fue baleada por elementos del Ejército, el cual tuvo que reconocer que un soldado accionó involuntariamente su arma.
Poco tiempo después, un brigadista de que portaba una playera de Duarte, fue asesinado por un comando armado que le disparó unas 30 veces.
Borruel acusó a Duarte de copiar sus promesas de campaña.
Asimismo, el área jurídica del PAN lo denunció también ante la Procuraduría local y la PGR por...
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