La sobrina sin remedio / El chico tímido

Yo sé que ya pasó Halloween, pero hoy quiero contarles una historia acerca de un monstruo que amo mucho.

Era una vez un chavo de Monterrey. Era el típico nerd, usaba lentes, superdelgado y ni su ropa ni su corte de cabello lo hacían ver atractivo. Aunque parecía nerd no era tan aplicado como otros, faltaba a muchas clases porque todo el día se la pasaba jugando futbol en la canchita. Pero no se diga de sus tareas, las maquetas que él hacía eran las mejores del salón, los planos eran muy limpios, sin una gota derramada de tinta china... sus dibujos eran hermosos.

Aparte de ser un "casi buen estudiante", también era muy caballeroso, tímido, hablaba correctamente, aunque en la cancha era un jijo de put.. que cuando se encabronaba decía toda clase de malas palabras. Tardó un año en hablarme, típica historia del chico que ve pasar a la chica que le gusta y nunca se atreve a hablarle, hasta que un día "se agarró las pelotas" y me dio una nalgada con la raqueta de pimpón. Así fue como llamó mi atención. Poco antes de que él hiciera lo que hizo, yo había expresado que andaría con el primer estúpido que se me atravesara (es otra historia). En fin, por un momento pensé en utilizarlo, que fuera mi "novio mandadero" el que te carga la bolsa, el que te hace tu tarea, el que va a la cafetería por ti, etc. Pero para su suerte, yo era demasiado promiscua, así que en la primera noche que lo conocí le bajé los pantalones y ... ¡¡¡OMG!!! (Oh, my God)... ¡le vi el pepinote! Entonces subió de rango y pensé en utilizarlo de "consolador", sólo que de carne y sin hueso, debido a las malas -y breves- "coJidas" (me gusta escribir coger con "J" para darle un énfasis sexual y distinguir entre agarrar y culear) con los otros 12 hombres antes de él. Así que intenté "coJérmelo" lo antes posible y probar ese pedazote de carne, ya que no había conocido ninguno de ese tamaño... y fue el ¡MEJOR!

Así le tomé cariño al chico nerd, que quería ser mi novio y yo aún quería seguir coqueteando con más hombres, porque es parte de mi naturaleza. Entonces le pedí que fuéramos mas abiertos, justos y honestos. Si él quería ver a otra chica, darle un beso o "coJer" con ella, él tenía todo el derecho de hacerlo tanto como yo... y los dos nos contaríamos las cosas. Con el paso de los años le fui dando consejos de todo, le di confianza para que no fuera tímido y él, a su vez, nunca me defraudó. Siempre fue superhonesto y me hizo tener mejor autoestima, todo esto me hizo enamorarme más de...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR