¡Silencio!... Del Toro está creando talentos
| Autor | Olivia Guzón |
A sus 47 años, el secreto de Guillermo del Toro para mantener el espíritu joven y hasta cierto punto retorcido que caracteriza sus películas es producir nuevos talentos.
Ésta es la razón por la cual se le ha visto menos detrás de la cámara en su papel de director y más como productor apoyando a nuevos directores, como Guillermo Morales (Los Ojos de Julia) y Troy Nixey (No Le Temas a la Oscuridad).
Ahora, el director mexicano repite su hazaña como "sensei" del argentino Andrés Muschietti y su ópera prima, Mamá, un thriller protagonizado por Jessica Chastain (Vidas Cruzadas y El Árbol de la Vida) y Nicolaj Coster-Waldau (Game of Thrones) en el que se puede ver claramente su mano maestra como productor ejecutivo.
"Sólo hay dos formas de mantenerse joven, enseñar o producir nuevos talentos", dice el director en el set de Mamá, en los estudios Pinewood de Toronto, Canadá.
"Aprendo mucho de ellos. No hay mejor manera que saber lo que haces, que decirlo a los demás, te ayuda a organizar tus pensamientos".
De aspecto relajado, incluso un poco desaliñado, con una camiseta gris y una chamarra negra, el director mexicano narra su primera impresión de su nuevo "discípulo" al ver el cortometraje homónimo, del que se desprende el filme.
"Vi el video y dije: 'este tipo tiene un gran talento'", explica, "los cortos pueden ser engañosos, pero cuando conoces al director uno sabe.
"Llevo haciendo esto por 25 ó 30 años y creo que puedo decir: 'este tipo es the real deal'. A veces le atino, a veces no, pero con Andy estoy seguro".
Sin embargo, aunque el director comparte su sabiduría con el novato, esto no quiere decir que Muschietti siempre hace caso de sus sugerencia o que siempre esté de acuerdo con él.
"Él va por su lado, puede que no esté de acuerdo con él, pero al final aprendo mucho de él. Nunca espero que se haga lo que yo pienso", expresa Del Toro.
El ejemplo más claro de esto es la selección de elenco infantil de Mamá, para el cual Del Toro sugirió niñas de cabello y ojos oscuros
"Me parecen que tienen un look más fantasmagórico, como del más allá", señala.
Pero Muschietti tenía muy claro lo que quería, y lo que quería era todo lo contrario: niñas de ojos claros y cabello rubio.
El resultado fue la selección de las pequeñas Megan Charpentier, de 10 años, e Isabelle Nelisse, de 7, como las dos hermanas que logran sobrevivir cinco años en un bosque auxiliadas por un espíritu con un instinto maternal muy posesivo.
DE GUILLERMO PARA LATINOAMÉRICA
Tanto...
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