'La senos jue'

PUEBLA.- En una vitrina de la sala-comedor de las comadres Esperanza Palafox y María de la Cruz Flores, una foto en blanco y negro de un joven Margarito Esparza Neváres vestido de charro, las acompaña para velarlo a distancia, pues ellas no pueden pagar el viaje a Sinaloa para ir al funeral que organizará su familia.

El cantautor y comediante murió en Puebla el domingo a los 79 años de edad debido a complicaciones por una neumonía que desembocó en un paro respiratorio.

Las comadres se sentaron por horas a asimilar la noticia en el sillón verde de dos plazas donde Margarito dormía cada que iba a verlas a Puebla y en donde durmió desde marzo y hasta el jueves en la noche cuando una ambulancia lo llevó al hospital del ISSSTE por una tos y problemas para respirar.

La foto que las acompaña no es la única, hay más en las paredes y en los celulares de las comadres, como las hay del resto de la familia, pues Margarito les compartió su vida desde hace 30 años cuando conoció a una de ellas por casualidad.

Supieron de su único vicio, dos cocas de lata, frías y diarias; que gustaba del arroz con leche y del atún con mayonesa, lo último que quiso comer al llegar la neumonía; que coqueteaba a solteras de ojos lindos; y que era enojón y mal hablado, pero muy generoso.

La última vez que llegó a verlas para vender fotos y discos en la Feria de Puebla había comprado pollo de una cadena de comida rápida, pero la mayor muestra de generosidad que Esperanza recuerda fue el día que se rompió un pie, andaba mal y él le mandó algo de dinero.

"A mí me llamó y me dijo que cómo seguía, que en qué me podía ayudar y me ayudó mucho", recuerda con nostalgia.

Del cantautor, explican las comadres, se dicen muchas mentiras, que lo levantaron mojado de la feria, que mendigaba por dinero en el Centro de Puebla por culpa de alguien, que si lo hizo por años y la peor de todas, que murió abandonado.

La verdad, dice María de la Cruz, es que sus últimos días fueron de cariño, tanto del que ellas le dieron en su pequeño departamento en una zona popular de Puebla, el de una sobrina que desde Guanajuato le pagó un enfermero y en especial el de dos hijos que lo vieron morir.

6 décadas de carrera artística tuvo Margarito

Pantallas y vagones

El cantautor y comediante supo ganarse el aplauso del público en el cine, la televisión y hasta en el...

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