Rebanadas/ De la selva a la ciudad
| Autor | Cony de Lantal |
Después de que el restaurante Les Lacs cerrara sus puertas, se abrió un compás de espera y hoy ese local ya tiene un nuevo huésped en avenida México, frente a Plaza México. Se trata de La Tovara, un nuevo negocio que se instaló para ofrecer comida del mar, muy al estilo nayarita.
El restaurante adquiere su nombre de la zona geográfica ubicada cerca del puerto de San Blas, en el que la vegetación y las selvas de mangle dan lugar a uno de los parajes exóticos más interesantes del País.
Y si alguien sabe eso, son precisamente los dueños de La Tovara, que de alguna manera han sabido aprovechar su imagen y hoy le están dando difusión con algunos detalles, incluso mercadológicos.
Ejemplo de ésto son los videos que proyectan en un par de televisores que tienen distribuidos en el local, además de las manteletas con información turística del lugar.
En sus paredes lucen fotografías enmarcadas de los palafitos, la vegetación y sus animales salvajes, mientras que el ambiente se escuchan sonidos de aves y cascadas, que supongo se grabaron en La Tobara.
Como atractivo de su carta están los tamales de camarón, que se sirven de entradas, antes de un plato fuerte como los pulpos al gusto, pescado zarandeado y por supuesto los cocteles de mariscos, entre otras especialidades no menos atractivas.
Para abrir boca, mi marido y yo pedimos un tamalito de camarón cada quien, preparado con una salsita de chipotle y la masa tradicional del tamal, cada uno de 8 pesos.
Estaban muy y ricos y te dejan picado, por lo que decidimos pedir unas pellizcadas también de camarón, que vienen servidas en un platón con cuatro piezas, preparadas con huevo y lechuga sobre una tortilla frita.
Debo admitir que me las esperaba totalmente diferentes, tal vez con el camarón frito y sin tanta grasa, pero no fue así.
En los platos fuertes, y atendiendo al ofrecimiento del capitán, mi marido pidió unos pulpos a la valenciana, pero no sabían cómo hacerlos, por lo que optó pedirlos al mojo de ajo.
Yo me incliné por un filete de pescado relleno de mariscos, pero nunca me imaginé que lo servirían envuelto en tocino frito y con mucha grasa. Para ser honesta el pescado relleno de mariscos que esperaba era al horno y con el mínimo de grasa.
Definitivamente nuestro error fue dar por hecho algo que no tenía porqué ser, finalmente el estilo de la cocina nayarita o de cualquier otra región del país puede variar enormemente. En fin, no estaban del todo mal en cuanto al sabor, pero tanto los pulpos como...
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