San Cadilla

El que nada debe...

Durante la asamblea extraordinaria de socios de Pumas del pasado jueves, me sorprendió la tranquilidad con la que acudió a la cita el presidente del club, Rodrigo Ares de Parga.

Les digo esto porque luego de cuatro años de ver como su predecesor, Jorge Borja Navarrete, se las ingeniaba para pasar desapercibido a su llegada, ya estoy malacostumbrado.

Quitando la asamblea en la que fue elegido (marzo 2012), el también ingeniero de ICA orquestaba todo un plan de arribo y salida del Universum para que los medios no se le acercaran o de plano no lo vieran.

Esto debido a que las malas cuentas en el plano deportivo lo perseguían, tanto, que llegó al punto de salir del edificio en CU por la puerta de atrás, literal, rodearse de "escoltas" o hacer que subieran su camioneta a la explanada, ponerla justo al lado de una puerta lateral y abordar como si se tratara de un alto funcionario de gobierno.

Incluso, en la asamblea en la que pasó la estafeta (mayo 2016) decidió desaparecer al más puro estilo de Harry Houdini.

Ahora les digo que Ares de Parga llegó el jueves al Universum quitado de la pena, atravesó toda la explanada para recibir al Rector de la UNAM, Enrique Graue, y a paso normal ingresaron para dar pie a la asamblea.

Incluso, al salir el "presi" se tomó unos minutos para platicar con los asistentes que se le acercaron y de nueva cuenta escoltó al Rector a su vehículo.

No cabe duda de que el que nada debe nada teme.

Su mejor atajada

Quizás la mejor atajada de...

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