Salva a su sobrina; él muere en tiroteo

Al escuchar la lluvia de balas desatada en un enfrentamiento en la Presa La Boca entre una célula de los Zetas y el Ejército, el soldador Óscar Ledezma Olveda abrazó a su sobrina de 4 años y a su hermana para protegerlas, y al hacerlo perdió la vida al ser alcanzado por el fuego cruzado.

El joven de 24 años había acudido a pasear, por vez primera, a la presa en compañía de la pequeña Melissa, su hermana Karina, de 22, y su amigo José Francisco Cavazos Martínez, de 34, quien también protegió a las mujeres y sufrió un balazo en el hombro derecho.

"Ya me dieron, ya me dieron", le dijo Óscar a Karina mientras los cuatro intentaban refugiarse de las balas agachados detrás del auto de José Francisco, quien fue lesionado por uno de los proyectiles.

"Oscarín", como lo llamaban en su familia, originaria de General Terán, pero con domicilio en el municipio de Juárez, quedó tendido en el piso y su hermana no dejó de alentarlo para que sobreviviera hasta la llegada de los socorristas, pero no resistió.

Ledezma Olveda se convirtió en una víctima inocente más de la delincuencia organizada, que desde el 2007 hasta ayer se tienen registradas 16, incluido él; mientras que unas 23 personas han sido heridas.

"Estuvieron en el lugar menos indicado y la hora no indicada y pasó lo que pasó. Mi hija me contó que cuando ellos ya venían a subirse al carro empezaron los balazos y que había soldados y no sé con quién (se estaban enfrentando)", expresó triste Óscar Ledezma Hernández, padre de la víctima.

"Lo que hicieron ellos dos fue arropar a mi hija y a mi nieta tratando de cubrirlas pero una bala perdida le arrebató la vida a mi hijo, que era un inocente, pero me siento orgulloso porque defendió a su hermana y a su sobrina.

"Le puede pasar a cualquiera con esta inseguridad, no se lo deseo a nadie pero pudo haber sido cualquiera de nosotros, se supone que ahí es un lugar para divertirse y nunca se imagina que va a haber una balacera".

A las 22:40 horas del viernes, una balacera entre el Ejército e integrantes de los Zetas dejó como saldo a cinco sicarios muertos, entre ellos el líder en la región citrícola, identificado como "El Tiburón".

El enfrentamiento se desató en el embarcadero de la Presa La Boca luego de que las fuerzas federales recibieron una denuncia anónima de personas armadas entre el depósito Bananas y el restaurante Playa Azul.

Los sicarios estaban en una camioneta GMC y un auto...

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