Salen roscas de superación

Con la precisión y eficiencia de una fábrica, pero con la dedicación y cuidado de los que trabajan con amor a su oficio, los integrantes de la asociación Drogadictos Anónimos preparan roscas para un Día de Reyes a gran escala.

Y es que a dos años de trabajar en la elaboración de panes, el centro de rehabilitación Fuente de Vida, ubicado en Guadalupe, ha multiplicado la producción de sus ya tradicionales roscas.

"Tuvimos que aumentar la producción, el año anterior hicimos como 2 mil 200 aproximadamente", señaló Javier Tintos, presidente del grupo.

Para esta ocasión hornearán 3 mil 800 roscas que venderán en parroquias, y en las cuales empezaron a trabajar desde el viernes dividiéndose en un dos grupos de trabajo: uno nocturno y uno diurno, cada uno con alrededor de 15 personas.

"Nos han enseñado que nuestra rehabilitación nos debe costar, cuando te cuesta la valoras un poco más y esta parte del taller ayuda en dos puntos: uno, que el joven aprenda un oficio para cuando se integre a la sociedad tenga algo en qué sustentarse y, a la...

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