'Te sacan dinero en vez de ayudar'

AutorÁngel Charles

"Cuando le empezamos a dar en México, siente uno miedo", relata Ángel Jiménez, mientras descansa en un estanquillo localizado en la caseta de cobro de la Autopista a Monterrey, cerca de Nuevo Laredo.

Molesto porque fue obligado a pagar mil 695 pesos al agente aduanal por sus muebles y enseres domésticos que traía en su vehículo, pese a haber liquidado por este mismo concepto 95 dólares en el Consulado mexicano en Chicago cuando tramitó su repatriación, se dejar ir contra las autoridades mexicanas.

"Siempre que venimos entre el tránsito, el policía, los oficiales, el aduanero, todo mundo nos quiere sacar dinero", reprocha.

Ya sabe que siempre que un paisano viaja a México para visitar a sus familiares debe prepararse con "un extra" en el bolsillo para enfrentar la serie de mordidas a la que está expuesto.

El reloj marca las 16:00 horas e inicia un viaje lleno de extorsiones hasta llegar a su destino final, Ciudad Nezahualcóyotl, en el Estado de México.

Visiblemente cansado, con un rostro demacrado por los casi tres días de viaje desde Chicago, don Ángel, un paisano que desde hace poco más de 10 años emigró a Estados Unidos, tuvo que regresar al país por la crisis financiera.

"En 10 años nunca se había puesto tan espantosa la situación", relata. "Sin dinero allá y sin dinero acá, pues mejor te vienes a tu tierra".

A bordo de una camioneta pick up Dakota roja, marca Dodge, modelo 1999, la cual luce repleta de artículos para el hogar y herramientas en la parte trasera, todo cubierto con una lona en color gris, apenas avanza un par de horas y la pesadilla comienza.

Antes de llegar a Escobedo, el paisano de unos 60 años, quien viaja acompañado de su amigo Miguel Ángel, es alertado por un despachador de gasolina mientras carga combustible: "Ya se pasó, jefe, era por el Libramiento, adelante hay tránsitos que se lo van a fregar, sólo por las placas foráneas".

Tras avanzar por la carretera libre a Nuevo Laredo, el paisano es interceptado por un agente, quien lo detiene con el argumento de que no trae placas vigentes para circular en México.

"Le hubiera dado por el Libramiento, para qué se mete para acá, trae una camioneta regularizada y no trae placas, así se le detiene el mueble", es la amenaza del agente, quien conduce la unidad 231, con placas SGA-5907.

La negociación concluye con una "mordida" de mil 600 pesos para el agente, que a cambio ofrece escoltarlo hasta el Libramiento Noroeste para evitar ser extorsionado nuevamente.

Al tomar la...

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