Rosaura Barahona / Reportajes de Alvarado
| Autor | Rosaura Barahona |
No me voy a declarar seguidora de los "Reportajes de Alvarado" porque no veo mucha tele, pero debo reconocerlo como uno de los poquísimos programas dedicados a explorar las costumbres culturales de nuestra región.
Es imposible hablar de tales reportajes sin mencionar el deprimente y patético nivel intelectual y cultural de los programas locales de televisión. Ya se ha escrito mucho al respecto en éstas y en otras páginas, pero el tema es en verdad preocupante.
La tele local se ha convertido en un instrumento no de diversión, sino de idiotización y eso duele.
Déjeme contarle algo ilustrativo. Un amigo me invitó a platicar sobre mis experiencias como editorialista con los estudiantes de periodismo de un centro educativo local. Fui gustosa.
Me recibió un grupo de 20 alumnos acarreados, cinco o seis interesados y un grupo de maestros atentos. Traté de ser amena al platicar con ellos.
Al finalizar, una maestra me dijo en privado: "Su plática estuvo más o menos bien (menos mal, pensé)... porque el año pasado no estuvieron buenas y este año han estado mejor. Pero, claro, la mejor de todas llenó el auditorio y hasta tuvimos que abrir las puertas, fue la de Chavana. Ésa estuvo mejor que la suya".
Lo entiendo y no lo dudo, pero eso me puso a pensar en lo impermeables que llegan los jóvenes a estudiar una carrera. A esas alturas deberían ya tener, al menos, una incipiente visión crítica para aplicarla tanto con Chavana como conmigo, pero es más cómodo nadar de muertito.
Aunque en lo personal no soporto los programas de Chavana (ni los de Mario Bezares, ni los de Pato, ni los de Brenda, ni los de Hoy ni otros más), entiendo que haya público para todos ellos. Si no, no seguirían al aire con tanto éxito. Sin embargo, quienes los producen piensan en el pueblo sólo como una masa amorfa e ignorante.
La televisión no se quiere usar para educar porque es un negocio y si un programa no deja dinero lo eliminan, pero ¿por qué usarla sólo para embrutecer?
¿Por qué no abrir pequeñas ventanas para permitir a los espectadores ver más cosas que la vulgaridad sexual y verbal y, así, no tengan que limitarse a alburear de manera denigrante?
Por eso "Reportajes de Alvarado" aparece como una excepción: de una manera sencilla y con poca producción, acerca los pueblos de Nuevo León a las ciudades que los desconocen y presenta personajes divertidos o admirables...
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