Rodrigo Ávila B. / Egipto: Hermandad Musulmana y Revolución
| Autor | Rodrigo Ávila B. |
Bajo el lema "el Islam es la solución", la Hermandad Musulmana cuenta hoy con una estructura territorial y una capacidad de movilización superior a la de cualquier otro partido político egipcio. En parte gracias a ello fue que su brazo político -el partido Justicia y Libertad- y su candidato Mohamed Morsi ganaron las primeras elecciones presidenciales democráticas en la historia del país. No obstante, apenas un año después de aquel histórico momento, un golpe de Estado militar -sui generis por el apoyo popular que concitó-, lo derrocó.
La presencia de la Hermandad en la política egipcia es añeja y multifacética. El Presidente nacionalista Gamal Abdel Nasser (1953-70) los mantuvo al margen al establecer, para las asociaciones religiosas, la prohibición de participar en la política. Su sucesor, Anwar Sadat (1970-81), los involucró en el proceso político en busca de legitimidad y nuevos contrapesos. Pero, irónicamente, fueron simpatizantes de la Hermandad quienes en 1981 lo asesinaron por haber firmado un tratado de paz con Israel en perjuicio de la causa Palestina (Hamas es, en cierta medida, un producto de la Hermandad también).
En aquel entonces Hosni Mubarak era vicepresidente y tomó el lugar de Sadat.
La existencia de la Hermandad -fraseada en términos de amenaza para la paz- fue el argumento que Mubarak utilizó para inhibir la competencia democrática y mantener el estado de emergencia y ley marcial durante sus 30 años de Gobierno. Todo lo anterior ocurrió de cara a un Ejército que, además de ser la columna vertebral del régimen político, comparte la escuela de Kemal Ataturk, en Turquía, y se asume protector del Estado-nación secular, heredado de la época colonial que siguió a la caída del imperio Turco-Otomano.
Al estar prohibida como organización política, la Hermandad se concentró en ser una organización social y económica capaz de emprender alianzas con otros actores. Como candidatos independientes o de otros partidos, sus integrantes participaron con cada vez mejores resultados en las elecciones parlamentarias de 1984, 1987, 2000, 2005 y 2010. Finalmente, ya como entidad legal agrupada en el Partido Justicia y Libertad, esta organización culminó su larga marcha hacia el poder al ganar la elección presidencial de junio de 2012.
Sin embargo, debe notarse que el derrocamiento de Mubarak y las elecciones presidenciales que le siguieron no fueron obra exclusiva de la Hermandad. Por el contrario, ello se debió en gran medida al...
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