Rodolfo Navarrete Vargas / Segundo semestre
| Autor | Rodolfo Navarrete Vargas |
La epidemia del Covid-19 y las acciones adoptadas para tratar de contenerla constituyen el choque más espectacular que ha enfrentado la economía mundial en decenas de años. Su impacto económico inicial ha sido profundo y aún se desconoce a ciencia cierta su duración. También se desconocen sus repercusiones de largo plazo. Las caídas económicas de los países y de sus niveles de empleo nunca antes habían sido vistas. Las respuestas de política económica han sido generalizadamente expansivas con el objeto de tratar de evitar, en la medida de lo posible, la destrucción del empleo y de las fuentes de trabajo.
México no es la excepción.
Habiendo finalizado el primer semestre, los datos de la actividad económica disponibles dan parte de varios fenómenos que no habían sido tomados en cuenta inicialmente:
- El agravamiento del problema del Covid, que en última instancia tenderá a afectar por más tiempo el crecimiento y el empleo en el País.
- La paralización para tratar de contener la epidemia fue completa en algunos sectores importantes de la economía, como son la industria automotriz, el turismo, restaurantes, construcción y servicios.
- El extraordinario crecimiento de las remesas de los trabajadores mexicanos en el exterior que amortigua en alguna medida los efectos de la caída sobre el consumo.
En este contexto, después de haberse contraído 1.4% en el primer trimestre, la economía cayó 19.9% en abril y es probable que lo haya hecho en cifras ligeramente menores en mayo y junio, tal como lo muestran algunos indicadores oportunos, como los PMI manufactureros de mayo y junio. La expectativa del mercado es que el PIB caiga 18.0% en el segundo trimestre, con lo que en el primer semestre se habría contraído en alrededor de 10.0%.
A consecuencia de la paralización total que observó el sector automotriz y a diferencia de lo sucedido en el resto del mundo, en donde el sector servicios resintió el efecto de la paralización económica, en México es el sector secundario o industrial el que ha liderado la caída económica. Así, la contracción del PIB en abril obedeció a una caída de 29.3% de las actividades secundarias (manufactura, construcción, electricidad gas y agua y minería), mientras que el sector terciario se contrajo en 16.4% y el...
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