Roberto Zamarripa/ El Canal de Zedillo

AutorRoberto Zamarripa

El tema es conocido en Los Pinos y en la Secretaría de Hacienda: el entonces Presidente Ernesto Zedillo intervino directamente en asuntos internos de Televisa y hay la sospecha que habría ayudado para sortear duras cargas fiscales de la televisora.

Todo empezó el 4 de marzo de 1997, en la casa presidencial. Era la una de la tarde y sentado a la cabecera de frente a sus interlocutores -cuatro de los cinco principales accionistas de la principal televisora del país Emilio Azcárraga Jean, Miguel Alemán Velasco, los hermanos Guillermo y José Antonio Cañedo White- Ernesto Zedillo hizo una definición estremecedora: "hay pacto histórico entre el Estado mexicano y la familia Azcárraga".

La noche anterior -el lunes 3 de marzo- el noticiero (24 Horas) entonces a cargo de Jacobo Zabludovsky transmitió un video en el cual Emilio Azcárraga Milmo anunciaba su retiro de la compañía y dejaba a cargo como presidente de la misma a Emilio Azcárraga Jean y como presidente del Consejo de Administración a Guillermo Cañedo White. La nueva directiva se presentó después del mediodía del martes 4 en Los Pinos para conversar del tema con Zedillo. Zedillo dijo en el encuentro que un mes antes, el 3 de febrero, había comido con Azcárraga Milmo "El Tigre" y que éste había hecho una encomienda particular de velar por el futuro de su hijo Emilio.

Un pacto histórico

En ese tenor, la reunión de los accionistas y la nueva directiva tuvo súbitamente un punto de tensión. José Antonio Cañedo comentó que al nuevo grupo de Televisa le interesaba renovar "el pacto histórico entre la empresa y el Estado mexicano". El mandatario corrigió a su interlocutor y le dijo que el "pacto histórico era entre el Estado mexicano y la familia Azcárraga". Y de una manera singular expresó su extrañeza por la presencia de los hermanos Cañedo ya que dudaba de su representatividad.

Dirigiéndose a Azcárraga Jean, Zedillo dijo que "los asuntos de Televisa los vamos a ver tú y yo directamente. Las cosas se arreglarán aquí". Frente a todos los presentes, citó a Emilio para un nuevo encuentro, sólo entre ellos dos en Los Pinos. Al resto del grupo les pidió que visitaran en ese momento al Secretario de Gobernación, Emilio Chuayffet.

En Bucareli, ya por la tarde, Chuayffet saludó a los directivos. Después habló con los hermanos Cañedo a quienes dijo que lo mejor que podían hacer, "como los viejos políticos", era tomar distancia de los acontecimientos e irse del país. Chuayffet le pidió a los Cañedo su...

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