Rebanadas/ Ritorna vincitore a la Bella Italia...

AutorCony De Lantal

Con todo el despapaye que se armaba en Calzada Madero y Gonzalitos por la construcción del polémico paso a desnivel (por cierto, ya urgía), no me había animado a regresar a La Bella Italia, ese restaurante italiano que se encuentra a un costado de la Facultad de Medicina de la Uni.

Nos encontramos con muy buenas sorpresas, pues el chef Renato amplió la lista de opciones y nos recibió, impositivo como buen italiano, con una pasta con queso de cabra, que el chef prepara con "papardelle" (fettuccine ancho) casero que ahí mismo elaboran. Esta pasta, que te venden en 100 pesos, viene abundante con una salsa de tomate adicionada con generosas cantidades de queso de cabra delicioso, del que el chef te hace "refill" mientras estás comiendo.

Mi marido lo pidió, pero cometió el error de darme una probadita antes de empezar. ¡No, papacito, éste me lo quedo yo! Prácticamente, le confisqué el plato completo. Claro que no me quedó más remedio que compensarle con el lomo de rib eye con papas que yo había pedido. No hallaba a cuál irle, los dos platillos estaban suculentos, pero si no le doy de alguno a mi marido, se me pone bravo y capaz que me muerde. El pobrecito de repente no controla sus instintos y otra serie de cosas.

Este lomo de rib eye que te sirve Renato es un enorme trozo de carne de alrededor de 600 gramos, horneado en leña y condimentado con salvia, romero, ajo y chianti. Te lo venden en 150 pesos, pero los vale. Está muy sabroso y alcanza sobradito para dos personas.

Los compadres que nos acompañaban pidieron por su lado un rico arroz muy italiano. El plato traía también camarón, almejas y hongos, y como venía abundante, todavía tuve el atrevimiento de servirme un poco, no me podía quedar con la tentación. Y eso no es todo, todavía le seguimos con un conejo a la romana, que es una buena porción en una salsa de tomate, ajo, aceitunas, romero y anchoas, ¡qué delicia! ¡Y qué atorón, mi chulis!

Con la misma salsa en la que cocina la carne del conejo, Renato sirve también un "papardelle al conejo", que es un plato principalmente compuesto por pasta, más una porción de esta carne, lo que explica la diferencia de precios, pues el conejo con salsa cuesta 100 pesos, y la pasta con salsa y con conejo cuesta 120 pesos.

Por supuesto, Renato sigue con todas sus especialidades en postres, entre las que destacan sus nieves estilo italiano hechas en casa, lo que en su caso sería referirnos a Roma. Por supuesto, nomás para rematar está el fabuloso bavarese...

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