Ricardo Elías/ McTacos

AutorRicardo Elías

Está en duda la terminación de los famosos Arcos del Milenio, básicamente, porque no se cuenta con la totalidad de los recursos necesarios, ya que el costo inicialmente previsto se ha cuando menos triplicado.

Hace algunas semanas, en este mismo espacio, criticaba no la obra como tal, pues me sigue pareciendo una obra valiosa para la ciudad y un emprendimiento encomiable, sino que criticaba y sigo criticando el lugar que se eligió para hacerla; en medio de transitadas avenidas en las que se circula teóricamente a 60 kilómetros por hora, y la única manera de que el espectador puede verla es estando en movimiento.

No quisiera ver los accidentes que sucederían si alguien, para apreciarla en toda su magnitud, decidiera pararse a media avenida, o los que habrá, sobre todo al principio, por andar bobeando al pasar entre la imponente escultura.

En ese mismo artículo decía que si el presupuesto disponible sólo alcanza para construir tres de los seis arcos, pues que dejaran los ya iniciados ahí (no hay de otra) y los otros tres que faltan se construyeran en otro sitio. Uno en el que se puedan apreciar y disfrutar por todos, parados o sentados a buena distancia, en un bonito parque o en una agradable plaza, sin tener de por medio un volante y la angustia de la velocidad.

Es inconcebible que la ubicación actual, además de otros inconvenientes, no permita a nadie tomarse con calma una foto teniendo de fondo los monumentales Arcos del Milenio.

Parece ser que mi propuesta de no hacer los arcos faltantes se está volviendo realidad. Y no porque los promotores del proyecto hayan tomado en cuenta mi humilde opinión, ni porque les haya hecho sentido ubicarlos en otro lugar, sino porque sencillamente se les acabó la lana. Y eso es razón más poderosa que cualquier opinión o manifestación pública.

Ahora que el futuro de esta obra está en juego, que me perdonen sus promotores el que insista en mi propuesta para que se construyan los otros tres arcos en otro lugar.

Habría muchas opciones de dónde hacerlos, ya sea en parques o plazas existentes, o hasta la construcción de una plaza especial para ellos, "La Plaza de los Tres Arcos", para que por una parte, y que...

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