Ricardo Elías / Burbujas de violencia
| Autor | Ricardo Elías |
Los sensatos dicen de quien frente al peligro no tiene temor, no es un valiente sino un inconsciente. Los temerosos dicen que es preferible no saber. Dicen también que el avestruz esconde la cabeza frente al peligro, dicho que se ha utilizado para etiquetar actitudes y mecanismos de evasión de la realidad y de falsos sobrevivires.
Ahora bien, decir que los múltiples y variados actos de violencia que se viven en todo el País son "sólo una burbuja", ¿es ser sensato, temeroso o "avestrúcico"?.
Veamos. No parece sensato minimizar la violencia llamándola "burbuja" cuando todos los días vemos y oímos (o sufrimos en carne propia) de asaltos, robos, asesinatos y secuestros.
No parece sensato decir lo que nuestro "Presichente" dijo en Rusia, que la "otra burbuja", la de los secuestros, ya se ha reducido, cuando el mismo día en la Ciudad de México se anuncia del aumento de los llamados secuestros exprés (ni que fueran cafés) y el aumento de las penas de cárcel para ese delito, al tiempo que se da una alerta roja en Chiapas. Si bien no podemos decir que la violencia es generalizada, es un hecho que está presente de distintas maneras en todo el País.
¿Será entonces "avestrúcico"?
Dicen que el avestruz, cuando hay un peligro, esconde la cabeza bajo la tierra, sin embargo a nadie nos consta. Nunca se ha visto a un avestruz en esas circunstancias, y cuando se trata de peligro, los animales a veces son más inteligentes que el ser humano. O enfrentan el peligro, o huyen para salvarse. No cometen el disparate de cerrar los ojos, exponerse y quedarse, en última instancia, a merced del peligro o del enemigo que lo puede atacar. El avestruz ante el peligro no esconde la cabeza, como la gente cree: en realidad agacha la cabeza para enterrar y proteger los huevos y que éstos no sean descubiertos.
No creo que minimizar la violencia sea un acto protector del Presidente para salvaguardar a los ciudadanos, creo más bien que es la actitud del temeroso que prefiere no oír ni saber. El Presidente en su fuero interno piensa que es mejor que los ciudadanos no sepamos y está de alguna manera convencido que los ignorantes son más felices (habría que desaforar a quien tenga esa clase de fuero interno).
Todo indica que es una rara combinación de insensatez y de una "avestrúcica" preferencia por la ignorancia.
Actitudes que confunden y se confunden entre sí, porque por una parte y como queriendo no saber, se minimiza la violencia al decir que los múltiples y frecuentes...
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