Ricardo Elias / Baldes de agua helada
| Autor | Ricardo Elias |
En las últimas semanas han circulado por las redes sociales videos de gente famosa echándose encima un balde de agua helada. Se trata de un desafío llamado el "Ice Bucket Challenge", una campaña para recaudar fondos, creada por la asociación para la investigación y servicios relacionados con la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ALS por sus siglas en inglés), también conocida como la enfermedad de Lou Gehrig, una enfermedad neurodegenerativa que afecta las células nerviosas, provocando una parálisis muscular progresiva de pronóstico mortal (http://www.alsa.org/).
El objetivo de esta peculiar campaña, como todas las que hacen las instituciones benéficas, no es otro que la recaudación de fondos.
Sin embargo, parece que las reglas de este desafío están alrevesadas, y algunos lo han aprovechado como promoción personal o simplemente lo han convertido en un chiste estúpido.
El reto consiste en aceptar donar 100 dólares a la Asociación ALS, y si no lo hacen, deben entonces echarse una cubeta de agua helada encima.
Lo "alrevesado" de las reglas me lo hizo notar uno de mis hijos en un comentario que publicó al respecto en las redes sociales: "A ver, a ver. Esto del Ice Bucket Challenge está al revés. ¿Todo mundo tirándose cubetas de hielo en la cabeza para no donar?
Aunque tanto mi hijo como yo estamos seguros que todos los que han aceptado este reto han hecho donativos importantes a la causa, si nos apegamos a las reglas del desafío tal como son, debemos suponer que los que han aceptado echarse un balde de agua helada encima, lo hicieron para ahorrarse el donativo.
Las reglas deberían decir que todo aquel que acepte el reto debe donar por fuerza cierta cantidad de dinero y además tirarse el agua helada encima y, si no lo hace, entonces se obliga a donar más. O, si quien fue retado a echarse un balde de agua helada sí se lo echa, el retador estará entonces obligado a hacer un determinado donativo. No se trata de pasar la "papa caliente" para salvar la cartera, sino de obligarse a hacer un donativo si otro acepta hacer una ridiculez en público.
El Presidente Obama, entendiendo que el objetivo de esta campaña es recaudar fondos para la causa, apegándose a las reglas, rechazó el reto y donó los 100 dólares que le pidieron.
A pesar de la imperfección de las reglas, la publicidad que se le ha dado a la campaña ha traído muchos beneficios a la Asociación ALS, habiendo recaudado hasta el día de ayer nada menos que 31.5 millones de dólares.
...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba