De rey a mendigo

AutorJuan Martín Montes

A casi 21 años de su retiro como jugador, el legendario Evanivaldo Castro "Cabinho" asegura que está muriendo por vivir lejos del futbol y que su conocimiento sobre este deporte ha sido mal valorado.

"Estoy siendo desaprovechado, estoy muriendo lentamente, no sé hasta cuándo pueda soportar porque ahorita que tengo las dos nacionalidades, puedo vivir en México, puedo vivir en Brasil", afirma quien fuera ocho veces campeón de goleo: cuatro con Pumas, tres con Atlante y una con León.

Cabinho tiene ofertas para irse a su país natal, pero él quiere seguir en México.

Su origen humilde en Brasil le ha permitido sortear su condición actual, porque su vida sigue siendo muy precaria, a pesar de ser el máximo romperredes del futbol mexicano con 312 tantos entre 1975 y 1986.

Sin un trabajo fijo, haciendo visorías en Brasil de talentos para el equipo que se lo pida, Cabinho vive solo en un departamento por los rumbos del metro Chabacano. Nunca se casó, pero tuvo cuatro hijos, dos hombres y dos mujeres.

El futbol le dio para comprar tres casas, dos se las quedó una de sus parejas, y otra la perdió con un "socio".

"Uno no comprende, porque no es posible que una persona como yo, que hizo un trabajo tan bueno como jugador, como profesional, como ser humano, de repente esté lejos del deporte", señala.

Cabinho pensaba que tras su retiro del futbol mexicano, en 1986, su acomodo natural sería en los Pumas, y así fue, trabajó un tiempo con las Fuerzas Básicas auriazules, y después se fue a Brasil a tomar un curso de entrenador.

A su regreso, dirigió a los Lobos BUAP en Segunda División y puso una escuela de futbol en Acapulco; en ambas empresas no tuvo éxito.

Después de eso creyó que Pumas lo volvería a arropar, pero ya van 20 años de eso, y nada.

"Entraron muchos Rectores, mucha gente diferente, yo traté de buscar oportunidad, y por otro lado también en otros equipos traté de hablar con ellos, pero me decían: 'tú eres universitario 'Cabinho'", recuerda.

Aun así, el nacido en Salvador de Bahía, quien debutó con el Flamengo en 1969, mantiene las esperanzas de regresar a la UNAM.

¿Y LOS AMIGOS?

"El Cabo" relata que tenía una buena relación con compañeros de su época, Spencer, Muñante, Mejía Barón y Vázquez Ayala, entre otros, pero desafortunadamente, ellos también se alejaron.

Evanivaldo Castro, de ahora 58 años de edad, anhela volver al mundo del futbol.

Los...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR