Revelan 'coyotes' ganancia

AutorManuel Appendini

Corresponsal

RINCÓN DE ROMOS, Ags.- "Yo no soy pollero, soy coyote". Dejando las cosas claras, así inició la charla un traficante de personas de este Municipio que tiene cuatro años viviendo de llevar indocumentados a los Estados Unidos.

Según la jerga de su oficio, explicó, el "pollero" es el que lleva a las personas hasta la frontera y ahí contrata quién las pase, a veces sin conocer al otro traficante, dejando a las personas a su suerte.

El "coyote" no. El "coyote" se interna con ellos, se arriesga y con astucia los va guiando hacia una mejor vida.

Su servicio, asegura, es sofisticado: tiene itinerarios, hoteles preferidos para alojar a sus clientes en la frontera y contactos en Estados Unidos para mover a los paisanos hasta el punto al que quieran ir dentro de la Unión Americana.

"Son camiones de paso, 'El Tijuana' llega a Altar, Sonora, y ahí te bajas, esa es la corrida que él trae, llegas al hotel, nos cooperamos entre todos, pagamos un cuarto grande", dijo en su pequeña casa de un cuarto, pero eso sí, equipada con todos los aparatos eléctricos que puede tener quien vive con cierta holgura.

"Hay cuartos desde 30 pesos, todos enchinchados, hasta un cuarto lujoso, nosotros no nos metemos a cualquier cuarto o casa de huéspedes porque luego son muchos problemas, llegan los 'robapollos', te sacan pistolas, te roban a la gente, te secuestran a la gente".

Sus hoteles preferidos en Altar son el Altaria, el Plaza y el Santa Fe, que a su decir, son los más seguros.

De Altar, mueve a los indocumentados hacia Sásabe, población ubicada en la línea fronteriza, donde inicia el verdadero peregrinar de los indocumentados.

"De Altar compramos las provisiones, compramos calcetines, sudaderas, lo que haga falta y de ahí nos vamos al Sásabe, a 90 kilómetros y ahí está el cerco que divide a México con Estados Unidos y ahí empiezas para dentro, a burlar la Migración (sic), el Ejército".

Al pasar la línea fronteriza inicia el desierto y con él una caminata de 30 horas que invariablemente desemboca en la comunidad de Tres Puntas, en Tucson, Arizona, donde otro contacto ya lo espera para "mover" a los paisanos dentro de Estados Unidos.

"No es mi socio, yo le pago el famoso...

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