Se reúnen en silencio

MURAL / Staff

En esta ocasión el diálogo se dio en silencio.

El salón de conferencias del Hotel Tapatío lució muy callado. Se reunió la comunidad de sordos y sordomudos Testigos de Jehová en su asamblea distrital anual, donde trataron temas de actualidad y superación con un enfoque bíblico, además del bautizo de dos nuevos miembros.

A sus 3 años, Jonathan Augusto Delgadillo quedó sordomudo, luego de haberse accidentado al querer subir una escalera. Desde esa fecha se las ha tenido que arreglar para superar las múltiples barreras de marginación de la sociedad oyente.

Ahora es parte de los Testigos de Jehová, comunidad a la llegó desde los 15 años, cuando descubrió que ahí el lenguaje de señas era una vía importante de comunicación.

"En otras religiones él se sentía solo, ahí no le enseñaban. Iba cuando tenía 15 años, entonces se sentaba y no entendía, porque no era en el lenguaje de señas; sin embargo, con Testigos de Jehová fue diferente", comentó Iván López Soto, quien interpretaba las señas de Jonathan.

Fuera de la iglesia, las cosas no son fáciles para Jonathan, quien a sus 19 años ya pasó por problemas de adicciones.

"A él muchas personas a veces lo atacan, tiene muchos problemas, que a veces con su mamá no le presta atención. Entonces, él tiene muchos problemas, que por mucho tiempo los ha tenido, antes era drogadicto y también tomaba", dijo Iván, a nombre de Jonathan.

A través de pantallas...

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