Se reúnen como 'cuates'
| Autor | Juan Carlos García y Juan Pablo Groenewold |
MÉXICO.- Se trataba de una reunión informal, así que el Presidente Vicente Fox y Marta Sahagún recibieron a los Príncipes como "cuates", dejando de lado las reverencias.
"(Esta visita) no es nada oficial, es muy informal, les ofrecemos una comida...", dijo Fox antes que arribaran ayer por la tarde Felipe de Borbón y Letizia Ortiz a la residencia presidencial.
Y así fue. Al llegar, el Presidente los recibió diciéndoles "Bienvenidos". "¡Hola, Príncipe, cómo estás!, ¡Hola, Letizia!", en lugar del "Bienvenidos Su Alteza Real Don Felipe y Su Alteza Real Doña Letizia" que marca la Casa Real como saludo correcto para los nuevos Reyes de España.
Aunque no es obligatorio, los hombres deben saludar a los Príncipes inclinando levemente la cabeza, y las mujeres, doblando un poco las rodillas. Ninguna de las dos recomendaciones se cumplió.
Es más, Marta Sahagún y Letizia tuvieron un atropellado saludo. La Primera Dama fue la primera en extender la mano y, sin saber qué hacer, Letizia se acercó y le dio el doble beso español. Sólo debió haber sido un saludo de mano y un beso, señala Protocolo y Etiqueta, ciberpágina especializada en trato con la realeza.
Aprende Letizia el protocolo
Antes de ir a comer con el Presidente Fox, los Príncipes de Asturias asistieron al Casino Español para un encuentro con los representantes de los Centros Españoles en el País y al cual arribaron alrededor de las 13:00 horas de ayer.
Caminando lento, y no por la fatiga de la agenda oficial de su visita a México, sino por acceder a los saludos y muestras de afecto de quienes siguen su recorrido, los Príncipes entraron al lugar.
Una de las sorpresas fue que doña Letizia se ha apegado más al protocolo real y dejó que Felipe de Borbón tomara las decisiones, como en el caso de las peticiones de autógrafos, en los que ella accedió siempre y cuando el Príncipe lo permitiera, a diferencia del día de su compromiso, cuando ella lo interrumpió para hablar con la prensa.
"Aquí el que manda es él", señaló Letizia, sin recibir el papel y la pluma, ante la primera petición de una firma, que fue condicionada por el Príncipe como la única que daría, ya que no deseaba dedicarle mucho tiempo a las rúbricas.
La pareja descendió de un Audi plateado, estacionado en la puerta del lugar y acompañado por un convoy de ocho autos y seis motocicletas, para dirigirse en compañía de la Embajadora de España en México, Cristina Barrios, a firmar el libro oficial de visitantes.
Ambos firmaron con tinta azul...
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