Renuncia tras polémica Embajador colombiano
| Autor | Wilson Cabrera y Octavio Pineda |
El Embajador de Colombia en México, Luis Ignacio Guzmán Ramírez, presentó su renuncia al cargo luego de que esta semana el Gobierno mexicano externó a la Cancillería de ese país su inconformidad con las reiteradas declaraciones hechas por el diplomático sobre la presencia de las FARC en México.
Guzmán envió este martes su carta de dimisión al Presidente colombiano Alvaro Uribe. Ayer, en entrevista con REFORMA, el colombiano negó que su renuncia haya respondido a presiones.
"Renuncié por motivos personales. No hubo presión ni de parte del Gobierno mexicano ni del colombiano. Simplemente creo que debe abrirse un nuevo espacio en la relación entre México y Colombia en el que se resuelvan los evidentes problemas binacionales.
"Sólo manifesté abiertamente inquietudes de mi gobierno sobre temas sensibles, como la necesidad de cerrar las fronteras a grupos terroristas, y sobre la urgencia de solucionar de una vez por todas el problema migratorio de mis conacionales, que son sometidos (en México) a múltiples arbitrariedades", dijo.
Y es que el Embajador provocó polémica desde julio del 2003, cuando aseguró que en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) existía una presencia activa de las FARC.
La declaración provocó el enojo del Rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente. Incluso, el Procurador Rafael Macedo de la Concha manifestó su molestia y cuestionó que el diplomático prefiriera hacer una denuncia pública, en lugar de acudir a las instancias legales.
El 10 de febrero, Guzmán aseguró que un miembro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) obtenía más fácil una visa para entrar al país, que un estudiante o un empresario de esa nación. Días antes, el funcionario había reiterado su petición para que México flexibilizara la entrega de estas micas a sus conacionales.
Este miércoles, con su renuncia en mano, Guzmán reiteró su versión sobre la presencia de las FARC en la UNAM, y la expedición de visas a colombianos.
"Yo sólo coloqué sobre la mesa dos temas que, a mi modo de ver como Embajador, era necesario que México y Colombia abordarán seriamente. Mi intención nunca fue dañar la relación binacional ni atacar a la Cancillería.
"En estos dos temas específicos de las FARC y las visas, fueron problemas que yo detecté y que, sin duda, deberán ser revisados para mantener una buena relación entre los dos países", dijo.
Aunque declinó detallar si es correcta la política migratoria de México, externó lo que bajo su punto de vista...
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