Que reforma el artículo 5o. de la Ley Federal contra la Delincuencia Organizada, suscrita por los diputados Lorena Villavicencio Ayala y Porfirio Muñoz Ledo, del Grupo Parlamentario de Morena

Fecha de publicación26 Noviembre 2020
Número de Gaceta XXIV - 5660
SecciónAnexos

Que reforma el artículo 5o. de la Ley Federal contra la Delincuencia Organizada, suscrita por los diputados Lorena Villavicencio Ayala y Porfirio Muñoz Ledo, del Grupo Parlamentario de Morena

Los suscritos, Lorena Villavicencio Ayala y Porfirio Muñoz Ledo, diputados a la LXIV Legislatura de la Cámara de Diputados del honorable Congreso de la Unión por el Grupo Parlamentario de Morena, con fundamento en lo dispuesto por los artículos 71, fracción II, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, y 6, numeral 1, fracción I; 77, 78 y demás aplicables del Reglamento de la Cámara de Diputados, someten a consideración de esta asamblea iniciativa con proyecto de decreto por el que se reforma la fracción II del artículo 5o. de la Ley Federal contra la Delincuencia Organizada, en materia de combate al uso de niños soldado por el crimen organizado, al tenor de la siguiente

Exposición de Motivos

A principios del mes de noviembre de 2020, nuestro país se conmocionó ante una noticia sumamente grave, dos niños en el centro de la ciudad se encontraron muertos en cajas. Yair tenía 12 años y Héctor Efraín, 14. Los dos eran hijos de indígenas mazahuas de San Antonio Pueblo Nuevo, estado de México, y vivían en la ciudad desde pequeños. Ambos eran comerciantes ambulantes.

En la línea de investigación hay dos posibles vínculos a la delincuencia organizada:

• La primera es que quedaron atrapados en medio de una confrontación entre la Unión Tepito y la Anti-Unión.

• La segunda es una disputa amorosa, pues Héctor habría estado cortejando a una adolescente de 14 años, cuya pareja se dedicaba a vender drogas.

A pesar de que se aprehendieron a los posibles culpables, aún no se sabe la razón por la cual asesinaron a Yair y Héctor. Además, dos niños más de la misma comunidad, y amigos de los niños asesinados, se encuentran actualmente desaparecidos, Johana Vianey Delgadillo Díaz, de 14 años y Brandon Arturo López Campos, de 15.

Algunos días después, el pasado 13 de noviembre de 2020, Alessandro fue secuestrado cerca de las 9 de la noche del martes. En las cámaras de seguridad se observa que dos jóvenes se le acercaron, lo amagaron y lo obligaron a subir a una motocicleta, en la colonia Guerrero. Acto seguido sus plagiaros llamaron a su familia para exigir un rescate.

Tres horas después del secuestro, policías capitalinos detuvieron a un joven de 15 años que arrastraba una maleta con el cuerpo del menor sobre la calle Lerdo. Jorge Rodrigo y Darwin Azael, ambos de 15 años de edad dijeron que la maleta la sacaron de un domicilio de la calle Magnolia número 108, en la misma colonia Guerrero y recibieron la promesa de ganarse 2 mil pesos en efectivo por tirar el cuerpo en un basurero del mercado.

Después de casi 10 años de conocer el problema y que se ha dejado a la deriva, México afronta una problemática que se agravará si como país no decidimos reconocerla y afrontarla.

El uso de niños, niñas y adolescentes dentro de la delincuencia organizada es una práctica mucho más común de lo que pensamos. Estos no son casos nuevos. Desde 2012, la BBC presentó un documental titulado ¿Por qué el narco recluta a miles de menores en México? En el que señaló que “La guerra contra el narcotráfico que se libra en México desde hace casi una década ha causado un serio problema, del que poco se conoce su magnitud: el reclutamiento forzado o voluntario de miles de adolescentes y niños para trabajar en las redes de tráfico de drogas.

“De acuerdo con el grupo Cauce Ciudadano actualmente unos 75 mil menores de edad están integrados a grupos de delincuencia organizada, y participan abiertamente en sus actividades. Un fenómeno que también se vivió en los años 90 en Colombia, cuando arreciaba la guerra del Estado contra el crimen organizado.

“La mayoría, unos 24 mil, se integraron al Cartel de Sinaloa y enseguida se encuentran los que participan con Los Zetas que suman 17 mil. Otros 7 mil 500 se ubican en las filas de La Familia Michoacana y el resto se distribuyen en otros carteles, según ha documentado esta asociación.

“Los menores se encuentran en la primera línea de violencia, pues incluso participan en combates entre carteles. Organizaciones civiles han documentado que entre el 1 de diciembre de 2006 y el último día de octubre pasado unos mil 873 adolescentes fueron asesinados”.1

Desafortunadamente, los grupos de delincuencia organizada han visto una oportunidad en el reclutamiento y entrenamiento de los menores dentro de sus operaciones delictivas. Según expertos, esos niños fueron víctimas de secuestros masivos; en otros casos sus familias recibieron amenazas para obligarles a trabajar para delincuentes, algunos más se unieron por miedo o porque era su única alternativa de empleo, en el menor de los casos, los adolescentes deseaban unirse a las bandas.

El común denominador es que son víctimas y victimarios que padecen la ausencia del Estado, sobre el que tenemos un especial deber de protección.

Se ha detectado que una de las causas más probables de su uso por el crimen organizado es porque en México antes de los 18 años las personas reciben sentencias mínimas.

En ese sentido, no es posible criminalizar a los niños, porque ellos son víctimas del sistema y del crimen; aumentar sentencias o tenerles un trato distinto supondría una re victimización.

Desde hace 8 años, el promedio de vida de un niño en la delincuencia organizada, es de tres años; la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) estima que 30 mil niñas, niños y adolescentes son recluidos por el crimen organizado; y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) señala que estos menores cometen al menos los siguientes delitos: tráfico de droga, secuestro y trata de personas, extorsiones, contrabando, piratería, extorsión, entre otros.

Ya no podemos ni debemos dejar que los niños sean esclavos del hampa.

Marco jurídico en materia de niñas, niños, adolescentes (NNA) y crimen...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR