Salud/ Reconoce los lunares benignos

METRO / Especial

Para muchos son algo sexy, otros piensan que son antiestéticos y tratan de quitárselos a como dé lugar; sin embargo, la realidad es que, por razones médicas, hay algunos lunares que deben ser removidos, mientras que otros pueden permanecer por toda la vida en la piel sin afectarte.

Si no te gustan, te los puedes quitar sin problemas, pero si lo que tienes es miedo de que sea algo que te pueda afectar, entonces infórmate.

No hay nada como visitar a tu médico si tienes dudas, pero el dermatólogo Sergio González recomienda analizar bien el lunar para saber si cumple con alguna de las características que lo hacen peligroso.

"Si es asimétrico, tiene bordes irregulares, colores que varían y un diámetro mayor de medio centímetro, entonces, con seguridad se trata de un lunar peligroso, de los cuales uno de cada 10 resulta maligno", explica.

Estas cuatro características predisponen al lunar a hacerse malo, y agresiones como la luz ultravioleta o el roce constante influyen mucho.

"Recomiendo quitar todos los que se tienen en las palmas de las manos, plantas de los pies, labios y áreas genitales, pues son los que más riesgo conllevan", indica.

El dermatólogo manifiesta que el hecho de que se presenten estas cuatro características es señal de que el lunar puede ser agresivo.

Por otro lado, si un lunar se pone más oscuro de lo que era o empieza a tirar pigmento por debajo de la piel, así como también si crece y duele a la persona, entonces también es recomendable quitarlos, pues así se puede evitar que se corran riesgos.

"En el caso de los lunares congénitos, que es con los que se nace, si éstos tienen pelo es recomendable quitarlos, aunque hay algunos que abarcan áreas grandes y resulta imposible, así que hay que estarlos vigilando y si hay algún sitio que cambie de color, que se quite ese pedazo", comenta.

Hay varias formas de extraerlos, pero la cirugía en huso es lo más recomendable.

"Si tienes la sospecha de que puede ser un tumor lo que hay detrás de ese lunar, se recomienda quitar un margen de medio centímetro de seguridad para evitar la expansión alrededor del mismo", indica.

Cualquier lunar puede ser removido, sea necesario o no, y, dependiendo del lugar se puede hacer una cirugía o utilizarse la técnica del rasurado que es un proceso sencillo: se anestesia al paciente, se le corta y se quema la base para que cicatrice, indica.

Otra forma de removerlos es por medio de rayo láser, y es mucho más sencillo pues no se necesita de...

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