Recomiendan mesura a sindicatos
| Autor | Marcela Turati |
Con la economía del país como está, los sindicatos deben ser siempre factor de equilibrio para no acabarse a la "gallina de los huevos de oro".
No deben ser imprudentes a la hora de exigir aumentos salariales desproporcionados, ni tomar posturas radicales para que todos los trabajadores salgan a tomar la calle, afirma el secretario del Trabajo y Conflictos del Sindicato Unico de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana, Víctor Fuentes del Villar.
Para el dirigente, uno de los hombres fuertes de Leonardo Rodríguez Alcaine, la clave de la política sindical es no estirar demasiado la cuerda con el Gobierno, pero tampoco permitirle que toque un ápice de las prestaciones ganadas por los trabajadores.
Lo dice el directivo de uno de los sindicatos más criticados por los privilegios que otorga su contrato colectivo a los afiliados.
"Nosotros tenemos que cuidar que la gallina de los huevos de oro no se acabe y ésa es una regla que maneja nuestro secretario general.
"Entonces parecería que él (Rodríguez Alcaine) está con el patrón, y no, puesto que han llegado aquí muchos patrones y él ha seguido, y cada patrón lo ha entendido y ha acabado queriéndolo y ha entendido que juntos podemos trabajar perfectamente bien", dice orgulloso.
Fuentes del Villar considera que Gobierno y sindicato se necesitan mutuamente: el Gobierno, porque el sindicato regula que los "imprudentes" no lleguen al poder y tomen acciones radicales que dañen la economía del país; el sindicato, porque el Gobierno es el dueño de la empresa, el que otorga las prestaciones.
El coordinador la división Golfo-Centro, con sus 14 secciones sindicales, presume el contrato colectivo de los electricistas de la CFE como uno de los más completos de México y del mundo.
¿Los enemigos del contrato colectivo están en el Gobierno?, se le pregunta.
"No lo podría asegurar", responde, "porque la relación que se ha dado entre el Presidente de la República, el Secretario del Trabajo, el Secretario de Energía, ha sido de permanente diálogo con nuestro secretario nacional, (una relación) de venir inclusive a dialogar con él -por supuesto no ha venido el Presidente- y siempre han salido perfectamente bien".
Pese a esa codependencia, niega que el SUTERM sea incondicional del Gobierno.
Explica que su búsqueda de "equilibrio" significa encontrar el término medio entre la defensa de los derechos de los trabajadores y las necesidades de producción de la empresa.
"No usamos el estilo de que la balanza...
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