Son reclusorios estancia de paso

AutorRolando Herrera y Leticia Fernández

Las libertades que conceden las autoridades penitenciarias, sumadas a las que determina el poder judicial, permitieron que durante los 13 primeros meses de la actual administración capitalina por cada 100 personas que ingresaron a los reclusorios salieran 94.

De acuerdo con datos de la Dirección General de Prevención y Readaptación Social del Distrito Federal, de diciembre del 2000 a diciembre del 2001 ingresaron a los reclusorios de la ciudad 20 mil 112 presuntos delincuentes y salieron 18 mil 877.

Del total de libertades otorgadas, indica el reporte, 15 mil 360 fueron por resoluciones del poder Judicial tanto local como federal, mientras las 3 mil 517 restantes fueron concedidas por las autoridades penitenciarias capitalinas.

Las liberaciones decretadas por el poder judicial corresponden a garantías concedidas para que las personas enfrenten su proceso fuera de la cárcel, o bien, porque durante el juicio o al término de él se les encontró inocentes de los delitos que se les imputaron.

En cambio, las libertades dadas por las autoridades penitenciarias son consecuencia de los beneficios legales a que tienen derecho los delincuentes que han sido encontrados culpables.

La dinámica en la entrada y salida de internos de los reclusorios, destaca el documento, permitió que las cárceles capitalinas no se desbordaran.

De no haber salido las 18 mil 877 personas, los penales, que en diciembre del 2000 tenían 20 mil 910 internos, hubieran alcanzado la cifra de 41 mil 22 reclusos.

Dado que la capacidad instalada de los penales es de 16 mil internos, eso hubiera significado una sobrepoblación del 156 por ciento.

Tanto el poder ejecutivo, a través de la Dirección de Ejecución de Sanciones Penales, como el judicial, por medio de jueces y magistrados, son las autoridades que pueden liberar a los individuos que han sido detenidos por ser presuntos responsables de algún ilícito, o incluso, por ser plenamente culpables de lo que se les acusa.

De acuerdo con los datos de la Procuraduría capitalina, en el periodo ya referido, quien determinó el mayor número de libertades para los internos fueron los jueces de primera instancia, quienes pusieron en la calle a 5 mil 486 reclusos.

La segunda autoridad que concedió mas libertades fue la Dirección de Sanciones Penales, quienes le otorgaron beneficios a 3 mil 517 internos.

Los magistrados de las distintas salas penales otorgaron la libertad a 909 internos, a 210 de ellos por haber revocado los autos constitucionales...

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