Recibe Tepic a nuevo Obispo
| Autor | Celso Mariño |
Tiene 76 años, y de ellos, más de un tercio los ha dedicado a Tepic y su feligresía, a la que cree haberle inculcado un sentimiento misionero.
Tras 27 años al frente de la Diócesis de Tepic, el Obispo Alfonso Humberto Robles Cota deja hoy su encargo a su sucesor, el hasta hace poco Obispo de Nuevo Laredo, Tamaulipas, Ricardo Watty Urquidi.
Robles Cota ahora se apresta a vivir como un religioso más en la capital de Nayarit.
"Yo le indiqué al Papa, desde mi renuncia (a la Diócesis), que mi intención era quedarme a vivir aquí, en Tepic", dice en entrevista el Obispo originario de Los Mochis, Sinaloa.
Al igual que todos los sacerdotes que cumplen 75 años, y por mandato del Derecho Canónico, Robles Cota presentó su renuncia al Vaticano al alcanzar esa edad.
"Yo presenté mi renuncia hace poco más de un año, (y) al año y tres meses yo recibí la respuesta del Papa", explica quien ha estado al frente de esta Diócesis desde el 1 de marzo de 1981.
Robles Cota asegura haber vivido muchas satisfacciones al frente de la Diócesis de Tepic, pero hay una en particular que más le agrada.
"No he dudado en decir que una de las más grandes satisfacciones de un Obispo es poder ordenar nuevos sacerdotes (...) En estos 27 años se han ordenado apenas 143 nuevos sacerdotes que es apenas un poquito más de la mitad de los que actualmente forman nuestro presbiterio (de la Diócesis)", menciona vía telefónica quien encabeza actualmente a poco más de 217 sacerdotes de 73 parroquias.
Pero también le satisface enviar religiosos locales a evangelizar otras tierras, como a Kenia, en África; a comunidades del Perú amazónico y hasta a poblaciones marginadas de Centroamérica, en donde hay la presencia de al menos un sacerdote forjado en Nayarit.
"La Diócesis pienso que comienza a tener pensamiento como debe tenerlo la Iglesia, de Iglesia misionera, porque necesitamos dar para recibir, porque si nada más estamos pidiendo que Dios nos mande más y más y no damos, entonces no trabaja bien el amor y la caridad evangélica".
Sin embargo, reconoce que todavía en el territorio a su cargo aún hay carencia de vocaciones.
"Tenemos, creo que un número muy bueno de sacerdotes pero no vamos a decir que somos la mejor Diócesis, porque, aún teniendo poquito más que otras Diócesis pues todavía hay muchos problemas, hay mucha necesidad de sacerdotes, sobre todo en las zonas costeñas, que han sido las más difíciles de evangelizar y han sido las menos favorecidas", explica.
La Diócesis abarca gran...
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