Recibe Edgardo Codesal un último faul
| Autor | Alejandra Benítez |
Luego de presentar su renuncia a la Comisión de Arbitraje de la FIFA, Edgardo Codesal, reveló que se va molesto y decepcionado pues, a pesar de que nominó al colegiado mexicano Felipe Ramos Rizo para que estuviera como cuarto oficial en la Final del Mundial, su propuesta no tuvo apoyo por parte de Emerson Maturín, dirigente de los árbitros de la Confut, a modo de revancha por haber contendido hace unos meses por la presidencia de la Confederación ante Jack Warner.
"Para mí fue muy molesto que el nuevo representante de la Confut, designado por el señor Warner, con el cual hizo muchas presiones para que estuviera dentro de este campeonato, no propusiera a Felipe Ramos Rizo para continuar en el Mundial.
"Cuando yo lo propuse para estar por lo menos de cuarto oficial para la Final, no fui apoyado por ese mismo miembro, parece mentira que estando por la misma Confederación no me apoyara en nada, entonces esto es muy triste; que se vea un motivo de revanchismo de esta manera me causa mucha molestia", indicó en entrevista telefónica desde Japón.
Codesal dijo que de haber tenido mayor apoyo, Ramos Rizo incluso podría haber aspirado a dirigir el encuentro por el Tercer Lugar.
"Felipe tuvo oportunidad de estar como suplente en la Final, de pitar el partido por el Tercer Lugar, tuvo una gran actuación, demostró una gran capacidad, que vale por sí mismo, es uno de los mejores árbitros del mundo, le tocaron de los partidos más difíciles del torneo.
"Esperaba que el representante tuviera la dignidad de apoyarlo, pero no tuve el eco suficiente para poder sostenerlo en alguno de los partidos que quedaban y su participación quedó reducida a estar como cuarto oficial en el partido por el Tercer Lugar; de todos modos, para él debe ser un orgullo lo que ha realizado, tomando en cuenta todas las dificultades que se vivieron", declaró.
Codesal afirmó que tendrá que haber una reestructuración completa del arbitraje mundial y también de la forma en que se realicen las futuras nominaciones para la Copa del Mundo de Alemania 2006, pues es preferible llegar con un grupo de 24 silbantes de sobrada calidad, a imponer un número mayor, simplemente para evitar que se molesten los dirigentes de las diferentes Confederaciones.
Explicó que tendría que existir un programa de trabajo, de por lo menos dos años para cada silbante, tomando parte en torneos internacionales para foguearse.
"Necesitamos generar un programa mundial de mejor preparación para ellos y no hacer un...
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