Recae Ozzy en drogas; dice ser eterno infeliz
| Autor | Luis Carrillo |
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LOS ÁNGELES.- "El Príncipe de las Tinieblas" estuvo viviendo en la oscuridad los últimos meses, pero asegura que ya lo superó.
Ozzy Osbourne, quien dice ser infeliz por naturaleza, reveló que volvió a beber alcohol y consumir drogas, y se disculpó con su familia por recaer en adicciones.
"Durante el último año y medio estuve tomando alcohol y drogas. Estuve en un lugar muy oscuro y me porté como un idiota con la gente que más me quiere: mi familia. Sin embargo, estoy sobrio desde hace 44 días", comunicó ayer en Facebook.
Y desmintió rumores de separación tras 31 años de matrimonio con su esposa, Sharon, quien fue vista vacacionando sola en Cabo San Lucas, según el portal TMZ.
"Para aclarar el asunto, Sharon y yo no nos estamos divorciando'', agregó en la red social.
En entrevista hace unos días, el músico justificó por qué tiende a ver el lado negativo de la vida.
"Nunca soy feliz al 100 por ciento. Mi esposa me dice 'eres el único hombre que voltea al cielo en una noche hermosa y lo único que encuentra es una pequeña nube negra'. Y sí, ese soy yo", comentó en exclusiva.
Ozzy arrastra las palabras. Pone los codos en la mesa de un hotel, y, con un vaso de agua que rellena casi cada cinco minutos, clava sus ojos en el techo y gesticula con aparente melancolía.
"Puedo ver un día soleado de verano y lo único que pienso es que mañana podría llover. Jamás tengo certezas de este mundo, digo cosas equivocadas, tengo temor todo el tiempo y siento que nunca soy lo suficientemente bueno. Soy una persona frágil, que no toma decisiones, pero al final, trato de arreglarlo de algún modo, ser mejor y tener más confianza en mí mismo".
No parece ser el ídolo a quien leyendas como Metallica y Megadeth han elevado al grado de "deidad"; mucho menos se siente merecedor de la veneración de críticos del rock, quienes lo consideran junto con su banda, Black Sabbath, cuna del heavy metal.
"Mi gran triunfo en la vida es mi gran familia y el haber crecido desde cero. Tengo propiedades, coches, joyas, un estilo de vida que nunca imaginé, pero a la vez, uno cree que lo material es felicidad. Un Ferrari ayuda a mi ego, pero a la vez pienso... ¿para qué mierda quiero un Ferrari a los 64 años?, ¿para qué diablos me quiero subir en algo así a mi edad?", expone el eterno fan de The Bea-
tles y quien ha vendido, en solitario y sin contar a Black Sabbath, unos 100 millones de discos.
"Sí, piensas que si haces mucho dinero y tienes coches, casa e hijos todo va a estar...
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