Rebanadas / Volver al número 840
| Autor | Cony Delantal |
Hace mucho no visitaba el restaurante de Américas 840 y que ha tenido, hasta el momento, tres nombres; primero Grill 840; después lo compró a un grupo restaurantero del Bajío y adquirió el nombre de Argentilia, como el de Querétaro, mezcla de argentino e italiano. Hoy es Argentinia.
Tiene la misma carta del anterior lugar, dicho por los meseros, no se le cambió nada. Es muy amplia, ofrecen pastas y cortes, pero me llamó la atención que cuentan con algunos platillos con rasgos orientales como el arroz frito con salsa de soya, la pechuga rellena de champiñones, jamón y salsa oriental o el pescado con salsa Sriracha.
Cuando llegamos, la recepción fue cálida, los meseros estaban atentos a nuestras necesidades y siempre llevaron todo rápidamente.
El lugar sigue siendo muy agradable, especialmente en la parte trasera, donde hay una fuente y los árboles acompañan la sombra de las mesas.
La variedad de pastas es satisfactoria, tienen ravioles de ricotta, fettuccine, lasagna bolognesa y cannelloni o lingüini de frutos del mar.
En cuanto a los platos fuertes, la oferta es más reducida, cuentan con cinco platos como las crepas de huitlacoche, rajas y espinacas; milanesa de res y otros. De la parrilla te pueden preparar arrachera, vacío, entraña, cabrería, bife de chorizo y cowboy, con precios que van de los 186 a los 490 pesos.
Como guarnición, hay para escoger entre las verduras al vapor, espinacas y papas a la francesa. Pero lo atractivo es que también tienen platos del mar, como el salmón, filete de atún y el pescado oriental, con precios que oscilan los 220 pesos.
Nosotros íbamos con un hambre atroz, así es que desde las entradas empezamos el recorrido gastronómico. Mi marido pidió una empanada de carne, de 39 pesos; luego una chistorra de 160 gramos, de 72 pesos. Y, para rematar, un taco de pescado petrolero, de 36 pesos.
La empanada estaba rica, con buen balance de ingredientes como la carne molida y las aceitunas. El taco estaba muy bueno, tenía cebolla, chile, cilantro y jugo Maggi, muy rico de acuerdo con mi marido.
Para los niños pedimos una lasagna bolognesa, de 124 pesos. No les gustó, la salsa estaba algo dulce; a mi marido tampoco le gustó, y yo la probé pero no me pareció mala, tal vez no era espectacular pero cumplía.
Mi esposo pidió un vacío, de 192 pesos, que llegó en una planchita de hierro, sin nada más que la carne...
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