Rebanadas / Dulces fiestas
| Autor | Cony De Lantal |
Viña Gourmet
Ya es mi costumbre en estas fechas darle una vuelta a uno de mis favoritos, me refiero a Viña Gourmet en Periférico Sur 4020, Col. Jardines del Pedregal en la simpática plaza Santa Teresa. Debo decir que no soy la única que gusta asistir en estas fechas, pues hice una reservación para comer con mi marido y me encuentro con que muchas contemporáneas estaban ahí en plena comida navideña con las amigas.
Nos sentamos cerca de la barra donde se podía sentir la presencia de esta ya muy cercana Navidad, pues volteabas a ver a cada mesa y te dabas cuenta que cada quien festejaba con sus familiares y amigos.
No quiero pecar de cursi pero nos sentimos con ambiente navideño y mientras eso ocurría y veíamos el menú, yo sugerí comenzar con unas tejas de parmesano con salmón de $73, resultan un buen inicio, ligeras e ideales para despertar el apetito consintiendo al paladar. Son tres pisos de hojaldre, cada uno cuenta con fresco salmón y aguacate, en general un platillo bien presentado como todos los que tuvimos el gusto de probar, pues no sólo por el sabor y calidad de los mismos hay un gran cuidado sino que la presentación de cada uno es esmerada.
Enseguida, del apartado de los foie gras y belloteros, mi marido pidió un serrano ibérico de $135, una acertada selección, no le reprocho su excelente elección por su relación calidad precio.
Mientras probábamos el serrano, compartimos también de una ensalada de manzana asada con vinagreta de mostaza antigua, espinaca y naranja de $59. Me hubiera gustado que el cuerpo de esta ensalada fuera la manzana, pero en realidad sólo le da un toque, de hecho es una donde predomina la espinaca.
Por cierto que esta vez pedimos vino por copeo y la elección fue un Gold Rock de $98 la copa, un tinto de uva Shiraz proveniente del sureste de Australia, que a mí en lo particular me agradó bastante, aunque soy más del gusto de los Cabernet Sauvignon éste fue un agradable acompañante a lo largo de la tarde.
De por sí un gran inicio, pero lo mejor fueron los platos fuertes, para él un crujiente de bacalao de $159 y para mí, no podía fallar, el pato bañado con salsa de arándanos de $149.
El bacalao que eligió él, está presentado de manera atractiva a la vista con pisos de hojaldre que separan porciones de este pescado tan propio de la época... Una delicia.
De mi pato sólo puedo hablar bien, y debo decir que fue un día en el que estuve muy dulce, no sé qué opine mi marido pero, con sólo echar un vistazo a lo que pedí...
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