Raúl Méndez Segura/ Un futuro brillante para los servicios financieros móviles

AutorRaúl Méndez Segura

En la búsqueda para generar un retorno sobre la enorme inversión hecha en licencias y redes para la siguientes generación de comunicaciones inalámbricas, los operadores de telecomunicaciones a nivel global están considerando a los servicios financieros móviles como la siguiente y principal oferta de servicio para su enorme base de clientes. El resultado puede ser una convergencia entre Bancos y empresas de telecomunicaciones que transforme la Banca de menudeo.

Las finanzas inalámbricas ya son una realidad en Europa y pronto lo serán también en el resto del mundo. La tecnología inalámbrica puede convertirse en una amenaza competitiva real para los Bancos al cambiar la forma en que los consumidores manejan sus transacciones financieras. Desde el punto de vista de Booz&Allen, lo que hace real esta amenaza es que el contenido financiero está adaptado para su entrega en teléfonos móviles, especialmente la nueva generación de datos inalámbricos ("2.5G y 3G). La tecnología inalámbrica ofrece una plataforma segura y en tiempo real para tareas rutinarias como el pago de cuentas y consulta de saldos en chequera, permitiéndole a los clientes administrar sus finanzas sin importar donde estén.

Ya existe la infraestructura para hacer pagos consumidor a proveedor y persona a persona vía teléfono móvil. Los operadores inalámbricos europeos necesitan urgentemente desarrollar nuevas aplicaciones exitosas para convencer a los inversionistas a apoyar sus caros planes 3G. Aunque se tienen altas expectativas sobre aplicaciones intensivas de banda ancha como video conferencias y juegos inalámbricos, todavía transcurrirán varios años antes de que éstos sean viables comercial o técnicamente. Los servicios financieros móviles pueden entregarse ahora y el modelo económico es robusto.

Las finanzas inalámbricas son una extensión lógica de la tecnología existente para los consumidores. Todas las innovaciones en finanzas al menudeo complementan, más que complican las vidas de los consumidores.

Pagar en la caja con un teléfono inalámbrico ofrecería conveniencia y potencialmente, hasta podría ofrecer mayor seguridad. Para el...

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