'Lo que yo quiero está afuera'

AutorImelda Robles

Unas mujeres adentro pierden la noción del tiempo, otras no pueden, pues se refleja en el crecimiento de sus bebés y saben que pronto tendrán que separarse.

"No sé la verdad, a mí me detienen con él, entonces nos empiezan a poner muchas cosas que la verdad no", dice Patricia, mamá de unos cuates de 1 año con 2 meses -niño y niña-, que viven con ella en el Centro de Reinserción Social Femenil de Escobedo.

Hace casi dos años fue detenida con su entonces pareja, ahora se refiere a él como el papá de sus hijos.

Ambos fueron recluidos en el Penal del Topo Chico y un mes después se enteró que estaba embarazada.

No está sentenciada. Enfrenta delitos contra la salud y homicidio calificado, y expresa que no tiene claridad del porqué está en el reclusorio.

"Hay mucha gente que tiene miedo, yo me incluyo, que tenemos miedo de salir", expresa, "o sea el bullying de la gente, de la propia familia, o sea todo eso quieras o no, sí nos afecta demasiado".

El martes 26 de febrero se permite el acceso a la prisión. Al cruzar la puerta de seguridad, tras una malla hay una amplia explanada limpia, algunas mesas de concreto y canastas de basquetbol.

Si las imágenes se comparan con las que han salido a la luz del Penal del Topo Chico, a simple vista confirmarían que sí salieron de un infierno desde que llegaron aquí el 13 de diciembre.

Cambiaron de fachada, pero el dolor y la historia de cada una sigue.

II

Este día son 379 internas -15 embarazadas- de acuerdo a las autoridades. En el recorrido por las canchas y área de talleres no hay más de 150.

El martes 26 de marzo fueron trasladadas a otro penal 40 reclusas.

Se indica que por privacidad de las mujeres, no habrá ingreso a los dormitorios ni el comedor.

"Hasta yo me sorprendo de las fuerzas y de todo lo que me sale", comenta Patricia, aún con rasgos de adolescente, "porque si con un bebé andas para arriba y para abajo, yo ando con los dos. Y se duerme uno, se levanta el otro".

Habilitaron una estancia colorida y equipada con juguetes. Hay seis niños y seis niñas que podrán vivir en el Penal hasta que cumplan 3 años, como lo marca la Ley Nacional de Ejecución Penal.

"El hombre sale de la puerta de su casa y ya es soltero", platica Patricia, "y quieras o no, cuando una mujer sale de su casa se preocupa de que si ya comió el niño, que mamá está enferma".

La directora de Reinserta, Saskia Niño de Rivera, indica que en el Topo Chico eran más de 70 niños, pero cuando las internas supieron que serían cambiadas de...

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