Promueven vida lacustre

AutorAlejandro Alvarado

A lo largo de 4 mil años en la región Valles hubo cambios políticos y religiosos, de la cultura previa a la Tradición Teuchitlán se construyeron pirámides circulares, luego llegó el tiempo para la Tradición Grillo con edificios rectangulares como la de Palacio de Ocomo y siguió la Tradición Atemajac, poco estudiada porque los vestigios están bajo las ciudades contemporáneas.

Pese a estos cambios que hablan de una ritualidad diferente, el modo de vida lacustre persistió hasta que la Laguna de Magdalena, antes la segunda más grande de Jalisco, se secó en 1930 por cuestiones agrícolas, expresó la arqueóloga Ericka Blanco.

Sobre la vida lacustre, en el Centro Interpretativo Guachimontones "Phil Weigand" arrancó ayer el programa "Un Peculiar Modo de Vida" con una serie de conferencias, talleres y una exposición que tendrá como invitado al Municipio San Juanito de Escobedo.

"En San Juanito de Escobedo, anteriormente se reconocían a los petateros de San Juan por una actividad que creemos tiene una reminiscencia prehispánica, se trata de la elaboración de petates, pocos de los habitantes de esta localidad lo recuerdan, sólo unas cuatro o cinco personas saben describirte cómo se hacían los petates", dijo la arqueóloga.

En tiempos prehispánicos el petate fue un producto multifuncional, se usaba para dormir, sentarse y hasta para cargar, y era accesible para todos los estratos sociales...

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