Prevenga daño al corazón

AutorNatalia Vitela

La hipertensión arterial, la diabetes, el síndrome metabólico, el tabaquismo y el aumento de lípidos (grasas) en la sangre, entre otros, son los principales factores de riesgo que provocan las enfermedades del corazón, primera causa de muerte en el País, indica Luis Lepe Montoya, director de la Sociedad Mexicana de Cardiología.

"Dentro del flujo sanguíneo fluyen múltiples sustancias como las grasas, las cuales son necesarias para el organismo, pero en exceso son perjudiciales", explica el también titular de la Asociación Nacional de Cardiólogos de México.

De acuerdo con el experto, el colesterol y los triglicéridos son los dos tipos de grasas más importantes presentes en la sangre.

El colesterol es transportado en el fluido sanguíneo en proteínas especiales llamadas lipoproteínas. Las dos más conocidas son las lipoproteínas de baja densidad (colesterol LDL) y las lipoproteínas de alta densidad (colesterol HDL).

El colesterol LDL es usualmente referido como colesterol malo, pues se acumula en las paredes arteriales. El colesterol HDL, o colesterol bueno, ayuda a remover el exceso de colesterol dañino de la sangre

¿Malo o bueno?

El colesterol malo se adquiere a través de la grasa de alimentos de origen animal principalmente y el bueno por medio de vegetales y frutas.

La dieta de los mexicanos, rica en grasas provenientes de alimentos de origen animal y pobre en vegetales y frutas, contribuye en gran medida al aumento de colesterol malo en la sangre y a la disminución del bueno, precisa Lepe Montoya.

El exceso de colesterol en la sangre causa ateroesclerosis, enfermedad que provoca un depósito de grasa en las arterias; lo que, a su vez, origina que se bloquee el flujo sanguíneo dentro de éstas y ello causa infartos al corazón o cerebrales, explica Néstor Saucedo, cardiólogo del Hospital 20 de Noviembre.

Lepe Montoya indica que, según las recomendaciones de organismos internacionales, las personas deben mantener niveles de colesterol total por debajo de 200 miligramos por cada decilitro de sangre y de baja densidad por debajo de los 150 miligramos por cada...

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