Presupuesto del desarrollo humano de nacionales: La defensa de los derechos humanos de las personas migrantes
| Autor | Miguel Vilches Hinojosa |
| Cargo | Licenciado en Derecho y en Filosofía Social |
| Páginas | 1-10 |
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Licenciado en Derecho y en Filosofía Social, Académico del Departamento de Ciencias Jurídicas de la Universidad Iberoamericana León.
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Ponencia presentada dentro de la Mesa de trabajo: Derechos Humanos de los migrantes
En esta presentación se pretende mostrar la necesaria relación que existe entre el desarrollo humano y los Derechos Humanos de los migrantes. Partiremos de una situación real que nos da que pensar de la forma en que se trata al inmigrante indocumentado (persona humana) en México. Después enfatizamos con cifras la condición de desigualdad y marginación en que se efectúa la migración, para pasar a la expresión del vínculo entre desarrollo y Derechos Humanos, para finalmente poner de manifiesto la importancia de los defensores de los Derechos Humanos en México.
El mexicano-nacional (yo igualado al otro por el sufrimiento) al ser tratado como extranjero indocumentado. Caso del Comité de Derechos Humanos de Tabasco (CODEHUTAB).
El pasado 8 de diciembre de 2006 aproximadamente a las 18:30 horas, el C. Ramón Domínguez Luna (RDL), Mexicano y originario del municipio de Teapa, Tabasco, fue detenido por la Policía Municipal de León cerca de la estación del ferrocarril de esta ciudad, en el marco de una redada para detenerPage 2 a inmigrantes centroamericanos indocumentados que viajan con dirección a los Estados Unidos de América en el ferrocarril rumbo a Ciudad Juárez.
A pesar que el C. RDL se identificó en el momento de su detención con su credencial del Instituto Federal Electoral y les dijo que trabajaba para la Empresa Tector, en donde se desempeñaba como soldador de estructuras metálicas; la autoridad lo consignó ante el Instituto Nacional de Migración, no sin antes despojarlo de $600 pesos en efectivo, de su celular, de su reloj y otras pertenencias personales.
El C. RDL fue deportado ilegalmente al país de Honduras en autobús, a donde arribó el 12 de diciembre del 2006, después de sufrir maltratos de parte de los oficiales, por su desesperada insistencia durante todo el camino que duró la deportación hacia Honduras de que el era un ciudadano mexicano.
Una vez que el C. RDL fue liberado en el país de Honduras, y al no contar con dinero, ni con documentos personales emprendió el regreso a México por su propio pié. Viajó por varios días como centroamericano indocumentado y sufrió robo y extorsión durante su trayecto no solo por las autoridades de los diferentes países, sino también por organizaciones que controlan el tráfico de personas.
Finalmente pudo llegar a territorio nacional y el Grupo Beta lo encontró en muy malas condiciones el 23 de diciembre de 2006 muy cerca de la vía del ferrocarril de la ciudad de Tenosique, Tabasco. Fue llevado al Hospital Regional de Tenosique para su recuperación.
El C. RDL como consecuencia de esta detención y deportación arbitraria, además de la violación a sus garantías individuales y a sus derechos humanos, ha sufrido afectaciones en su integridad física y moral; así mismo padeció la perdida de su trabajo, con todos los derechos que le correspondían después de 8 años de trabajo en la misma empresa.
Es necesario señalar que la práctica de deportar a mexicanos con inmigrantes centroamericanos se está convirtiendo en una práctica cotidianaPage 3 tanto de las corporaciones policíacas que colaboran con el Instituto Nacional de Migración, como de las autoridades migratorias que están abusado cada vez más de la situación de vulnerabilidad en la que se encuentran los inmigrantes internacionales sin documentos en nuestro país.
En el 2006 México se convirtió en el primer receptor de remesas en el planeta al superar por 2 mil millones de dólares a la India, que en ese mismo año recibió 23 mil millones de dólares por concepto de remesas. Aunque no queda claro que los emigrantes y sus familias sean los únicos beneficiados de estas cantidades de dólares que se inyectan anualmente a nuestra economía, estas remesas y la experiencia de migrar para trabajar en el “norte” salvan de la pobreza a más del 20% de la población de nuestro país, ya que se calcula que cerca de 12 millones de mexicanos viven en Estados Unidos de América (y de los cuales 8 millones son indocumentados).
Estas cifras no sólo nos deben llevar a visualizar el potencial de las remesas económicas de los emigrantes mexicanos, sino que también evidencian el fracaso de la política de desarrollo que en general han seguido los gobiernos de nuestro país.1 En efecto, hay que señalar la tentación de los gobiernos a todos sus niveles de utilizar a los emigrantes y sus remesas para financiar el desarrollo que ellos han sido incapaces de atender y generar con eficacia.
Si entendemos la marginación como el fenómeno de carácter histórico y procesal que conforma una precaria estructura de oportunidades sociales para los ciudadanos, sus familias y comunidades, y los expone a privaciones, riesgos y vulnerabilidades sociales que a menudo escapan al control personal, familiar y comunitario,2 y enfatizamos la existencia de brechas de desarrollo entre regiones o países que se traduce en zonas que ofrecen mejores condiciones de vida que las que se tienen en el lugar de origen; podemosPage 4 comprender porque se señala convenientemente que no es la pobreza extrema la que obliga a las personas a emigrar de sus comunidades de origen, sino algo más sistémico que es la exclusión y carencia de oportunidades histórica en las que ha vivido la mayor parte de la población en México y la desigualdad de desarrollo que existe entre distintas regiones o países.
Esta constante exclusión y desigualdad de nuestro país en relación a otros, se constata al evaluar que durante el sexenio pasado (gobierno de Vicente Fox) más de 6 millones 800 mil mexicanos...
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