Prepárese para lo inesperado
| Autor | Ma. Dolores Ortega |
Un ataque cardiaco, accidente que inhabilite física y/o mentalmente, secuestro, enfermedad o la misma muerte del fundador del hombre clave o de algunos de los socios de la empresa familiar son sucesos que sorpresivamente pueden ocurrir y alterar la operación de la compañía y las relaciones familiares, si no estaban previstas las acciones que deberían seguir en caso de que pasaran.
Consultores de empresas familiares y abogados coinciden que es de suma importancia que los dueños e integrantes de una empresa familiar estén conscientes de que son vulnerables y que aun siendo jóvenes pueden enfrentar desde un accidente que los inhabilite hasta la muerte.
"El hecho de que no lo veamos, no quiere decir que no lo preveamos, lo ideal sería que estas situaciones inesperadas fueran plasmadas en las Constituciones o Protocolos Familiares y que a ellos se anexaran los documentos legales indicados para avalar las decisiones tomadas, por ejemplo, el testamento, pactos parasociales, en el seno familiar.
"Que no sólo afectan a la empresa como tal, sino también la propia operación, comportamientos y actitudes de los miembros de la familia", expone Rosa Nelly Treviño.
La directora del Centro de Empresas Familiares de la Escuela de Graduados en Administración y Dirección de Empresas, del Tec de Monterrey, destaca que es necesario promover entre las familias dueñas de empresas no sólo el espíritu emprendedor sino también la transmisión de valores como prudencia, precaución, orden y disciplina.
Y aunque abordar el tema de un posible fallecimiento de algunos de los miembros de la familia dueña de una empresa o de un suceso que los inhabilite es difícil, Mauricio Álvarez, director del Centro de Empresas Familiares de la Universidad de Monterrey, sugiere abordarlo y aplicar incluso un simulacro de muerte súbita.
"Cuando hay involucrada una herencia, un patrimonio, una autoridad, siempre es difícil hablar y abordar el tema, sin embargo, es necesario expresar a tiempo nuestros pensamientos y sentimientos acerca de la muerte o enfermedades catastróficas, y no irse con el sentimiento de 'nunca pude decirle lo que pensaba y sentía por ella'".
Es recomendable, detalla, que cada uno de los miembros propietarios de una empresa familiar haga un archivo "ábrase en caso de emergencia".
Éste debe contener la lista de recursos necesarios para el manejo económico, de autoridad y emocional en caso de una muerte súbita, tanto en la empresa como en la familia.
Acciones que los...
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