Prende los focos rojos la otra violencia en NL

AutorJosé García

Apenas tenía 24 años y fue asesinada a golpes por su propio novio, de 25 años.

Angélica Ortiz Sena fue hallada muerta el lunes, tendida sobre una cama y cubierta por sábanas. En el suelo estaba el cadáver de Jesús Arturo Rodríguez Bastidas, su pareja, quien se suicidó.

No es el único caso: recientemente un hombre mató de seis balazos a su propio hijo, alegando que ya no lo respetaba, mientras que otro segó la vida de su hermano a garrotazos.

"Ya me tenía cansado y lo agarré a leñazos", dijo el asesino.

Son tragedias provocadas por la violencia familiar, que no deja de romper registros históricos en Nuevo León y en junio pasado tuvo mil 671 denuncias, una cifra mensual nunca vista.

Durante el primer semestre del año se contabilizaron 8 mil 068 reportes de violencia familiar, un 21 por ciento más que en el mismo periodo del 2014.

Y aún faltan los meses más calurosos del año, que generalmente muestran un repunte en la incidencia, por lo que se podría superar el récord del año pasado, cuando se tuvieron 14 mil 803 denuncias.

Además de la violencia familiar, las lesiones y las violaciones han crecido hasta en un 100 por ciento en los últimos seis años en el Estado, llegando también a niveles sin precedentes.

Ante esto, especialistas advirtieron que, si bien han descendido las ejecuciones y robos, la violencia está golpeando ahora a la población a través de delitos que no son llamados "de alto impacto", pero son igualmente devastadores para las familias.

"Si piensas que se resolvió el problema de la violencia abierta de narcotráfico, bueno, ahora está brotando de...

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