Pólvora por decir 'ReBel'
| Autor | Luis Homero Echeverría |
Basta con autodenominarse como miembro de la Porra "ReBel" de los Pumas de la UNAM para obtener todo un "armamento" de bombas de humo, bengalas, cohetones y otros explosivos.
Así se refleja el fervor de un grupo de animación que tiene su centro de abastecimiento en Tultepec, Estado de México, donde la contraseña es simplemente decir que se viene de parte de la "ReBel" y el trato amable remplaza a la mirada hostil de los vendedores de los artefactos.
Un número telefónico en un mail enviado a los seguidores de este grupo de animación representa el primer paso para que, con sólo programar la visita, el integrante de la "ReBel" emprenda el viaje al corazón del poblado mexiquense para comprar sus objetos de "diversión".
Es el mismo Tultepec, donde no hace mucho a los mercaderes de este lugar los atrapó una explosión que consumió casas utilizadas como bodegas de artefactos pirotécnicos, dejando al descubierto un ambiente de peligro en el que habitaba la comunidad. Sin aprender la lección, esta industria continúa.
Con la llamada telefónica y el nombre de Felipa Sánchez, sin dejar de mencionar que se pertenece a la porra citada del equipo felino, las compras dan comienzo. Del interior de la casa y de una bodega ubicada enfrente, aparecen las bolsas de bombas de humo, de a 20 pesos; los cohetones, de a 30; las bengalas, al mismo precio; los botes de fijador convertidos en bombas de humo de colores, a 80, y demás aditamentos que doña Felipa y su esposo, el señor Urbán, ofrecen al fanático en turno.
El comportamiento de los mercaderes de objetos explosivos confirma que los de la "ReBel" son compradores asiduos, son clientes privilegiados. A ellos se les dan precios especiales y se les tiene lista hasta la mezcla de los colores azul y oro que utilizarán en las bombas de humo.
Este comercio no está prohibido en Tultepec, la Secretaría de la Defensa Nacional autoriza la fabricación y venta de juegos pirotécnicos en ese lugar, en todas sus modalidades. Sin embargo, varios establecimientos no operan abiertamente, como el de doña Felipa, donde en una casa se tiene que especificar una contraseña para ser atendido.
De esa forma, los de la "ReBel" obtienen sus provisiones para cada partido. En el centro de Tultepec ya es frecuente su presencia y cada semana son esperados: "Creo que pueden venir más tarde o...
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