DE POLÍTICA Y COSAS PEORES / Presea Saltillo

AutorCatón

"Mi mujer me vuelve loco en la cama". Así dijo en el bar un individuo. "¿De veras?" -le preguntó un amigo con voz al mismo tiempo de admiración y envidia. "Sí -confirmó el tipo-. Me esconde el control remoto de la tele"... El reverendo Rocko Fages, pastor de la Iglesia de la Tercera Venida (no confundir con la Iglesia de la Tercera Avenida, que permite el adulterio a condición de que en la realización del acto no se diga: "Oh my God!"), vio en la esquina de su templo a una mujer de cuya profesión no había duda, pues lo corto de la falda que llevaba permitía verle las credenciales. Poseído de santa indignación (la indignación de los creyentes siempre es santa; la de los agnósticos o ateos es mera corajina) el ministro fue hacia la perendeca y le espetó, severo: "¿Conoces el pecado original?" Sin azararse respondió la damisela: "¿Qué tan original lo quieres?" (Y es que de eso dependía el precio)... Saltillo cumple años el 25 de julio, día del apóstol Santiago. A la advocación del Hijo del Trueno está dedicada la hermosa catedral de mi ciudad, con sus tres cuerpos anacrónicos y anárquicos de monja franciscana, europea trasmigrada y virreina colonial. Pero no es nuestro patrono el Santiago Matamoros que aparecía en el cielo de la España, jinete en albo corcel, para poner en fuga con su espada a los infieles. La inscripción latina que se lee sobre el altar mayor del bello templo: "Sancto Patrono Iacobo Dicatum", se refiere al manso apóstol peregrino, cuya imagen lleva la esclavina, el cayado y la venera de los que van a Compostela, como fui yo en mi primera juventud, no tan plena como la segunda que ahora estoy viviendo. Este año no pude cantarle las Mañanitas a Saltillo, ese día me tocó estar en otra ciudad con la cual tiene la mía vínculos estrechos: Xalapa, la hermosa capital de Veracruz, de donde provino la semilla germinal de la educación coahuilense. Pido disculpas por esa ausencia a mis paisanos, si es que alguno entre ellos la advirtió. Cada año, en esa fecha, el Cabildo entrega la Presea Saltillo, distinción máxima que otorga la ciudad. Este año la recibió Jorge Dávila Flores, saltillense que ha prestigiado a su ciudad. En otro tiempo fui su maestro; ahora soy su amigo. Lo conozco bien, por tanto, y sé de su gran vocación de servicio. En su actual calidad...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR